Las universidades se abren a otro tipo de formación

La Unión Europea lleva años advirtiendo en sus informes de empleo y formación sobre la necesidad de formar estudiantes y trabajadores en tecnologías disruptivas y que éstos alcancen competencias y habilidades que están demandando las empresas que ya están digitalizadas o que basan sus modelos de negocio en la ecología, la sostenibilidad o la integración social.

La teoría dice que, a mayor formación de los estudiantes y trabajadores, menor índice de paro. Aunque esto no quiere decir que los puestos de trabajo coincidan con el grado de preparación de los empleados. De hecho, muchos demandantes de empleo sufren de sobrecualificación, generalmente consecuencia del desajuste entre las necesidades del mercado laboral y la cualificación de los demandantes. Precisamente, ahora se está viviendo en Europa ese desajuste, ya que la demanda de personal cualificado con nivel Formación Profesional de grado medio y superior es cada vez mayor.

Para dar respuesta a esta situación, el Ministerio de Educación de España lanzó en julio de 2020 un plan para la Formación Profesional con el objetivo de introducir la digitalización, la innovación y el emprendimiento en este nivel educativo, paso imprescindible para garantizar una mayor tasa de empleabilidad, reduciendo también el desempleo juvenil.

Por poner cifras: en España, la proporción de jóvenes matriculados en enseñanza de Formación Profesional es del 12 %, muy por debajo de la media de la OCDE (25%) y la Unión Europea (29%). Las previsiones para 2025 apuntan que el 49% de los puestos de trabajo españoles requerirán una cualificación intermedia (Formación Profesional). Sin embargo, en 2020 apenas el 26% de trabajadores cuentan con esta cualificación, mientras que las personas con baja cualificación se elevan al 35%.

Ante ese escenario, en la Universidad Politécnica de Cartagena, acaba de comenzar el proyecto 'ALLVIEW: Alliance of Centres of Vocational Excellence in the Furniture and Wood Sector' dirigido por la investigadora del grupo de Ingeniería de Redes de Telecomunicaciones, María Victoria Bueno.

«El consorcio de instituciones europeas de distinto ámbito que forman parte del mismo pretende asentar las bases», comenta, «para poder crear una red de prácticas profesionales en empresas a nivel regional, nacional e internacional, preparando aún mejor a los estudiantes para un mundo laboral globalizado, además de que reducirá el periodo de transición formación-trabajo y ofrecerá mejores perspectivas laborales tras obtener el título formativo». Por lo que el proyecto ALLVIEW llega en un momento clave de impulso de la Formación Profesional dual, innovadora y con un fuerte enfoque a las nuevas tecnologías.

En concreto, el proyecto ALLVIEW, en el que participan 22 entidades de ocho países europeos, se enmarca en la primera convocatoria especial Erasmus+ KA3-CoVEs para la creación de centros de Formación Profesional de excelencia y el desarrollo de ecosistemas de habilidades para aumentar la calidad y adaptabilidad de la Formación Profesional mediante el desarrollo de currículos innovadores y metodologías de enseñanza. Solo cinco, de 55 proyectos presentados, han obtenido financiación de la Comisión Europea.

En ese marco se van a desarrollar seis grandes líneas de trabajo. Por un lado, se utilizará la Inteligencia Artificial para desarrollar una herramienta software de libre distribución y acceso que conecte demandantes de empleo y formación con empresas y centros de enseñanza, reforzando el aprendizaje y prediciendo futuras necesidades formativas y de empleo de los trabajadores/empresas en el sector. Por otro, se elaborarán nuevos planes dinámicos de estudio para el aprendizaje de tecnologías disruptivas enmarcadas en los paradigmas de la Industria 4.0, Economía Circular, Inteligencia Artificial y Responsabilidad Social Corporativa.

Además, se introducirán nuevas herramientas y metodologías de enseñanza basadas en Realidad Virtual, Realidad Aumentada e impresión 3D, tres tecnologías clave para la digitalización y modernización tecnológica del sector y se generará un curriculum formativo común europeo para el sector del Mueble y la Madera. Asimismo, se promocionará la movilidad de estudiantes y profesores en el territorio europeo, siendo los socios entidades educativas el puente conductor para promover dicha movilidad y se colaborará estrechamente con las empresas más innovadoras en Europa para obtener los mejores resultados en el caso de la FP Dual.

Según María Victoria Bueno, «de estas líneas, la UPCT tiene como tarea principal el desarrollo software de una plataforma de código abierto con Machine Learning, una técnica de Inteligencia Artificial que se basa en la idea de que las máquinas pueden procesar datos y aprender de ellos sin una supervisión humana constante.

El software desarrollado permitirá identificar, mediante algoritmos de recomendación basados en Machine Learning, áreas de desarrollo formativo y laboral.

La UPCT también desarrollará contenidos formativos sobre tecnologías disruptivas presentes en la Industria 4.0, entornos de asistencia inteligentes e Internet de las Cosas, aprovechando su experiencia en el ámbito de la capacitación formativa, llevada a cabo ya en otros proyectos internacionales como IN4WOOD, MAKING 4.0, IoToAI o el H2020 Pharaon, entre otros».

Aunque el proyecto acaba de arrancar, el pasado 12 y 13 de noviembre tuvo lugar (de manera virtual, dada la situación actual) la primera reunión del consorcio, en la que se establecieron las principales acciones a desarrollar en los próximos seis meses. No obstante, la investigadora de al UPCT asegura que «el consorcio de ALLVIEW es sin duda un valor añadido en el proyecto que permitirá obtener resultados tangibles y con recorrido. Por ejemplo, forman parte de ALLVIEW centros de Formación Profesional y universidades europeas que estén a la vanguardia en formación innovadora en TICs. De España podemos mencionar a CETEM, centro tecnológico pionero en formación y desarrollo de proyectos con empresas y otros europeos en Industria 4.0, eco-innovación o integración social aplicadas al sector del hábitat. Asociaciones empresariales como AMUEBLA o CENFIM, conocedores de las necesidades reales de la industria, y representantes de entidades públicas con capacidad de influir en las políticas regionales de especialización inteligente (RIS3), como el Servicio de Empleo y Formación de la Región de Murcia».

En su opinión, «la Formación Profesional en España ha estado desprestigiada durante años. Afortunadamente la demanda del mercado laboral ha hecho que la Formación Profesional cobre impulso, convirtiéndose en puente para luego cursar estudios de grado universitarios y como una muy buena opción para encontrar empleo».

«La FP dual también está ganando terreno y, aunque en España todavía estamos lejos de países como Alemania, donde goza de una gran tradición, a través del proyecto ALLVIEW trabajaremos para dar ese impulso y contribuir a mejorar la formación y las oportunidades laborales de los ciudadanos», añade.

El presupuesto total del proyecto, que tendrá una duración de cuatro años (hasta finales de 2024), es de 4.949.950 € de los que la Unión Europea aporta el 80%, es decir, 3.959.959€. Entre los socios figuran Centros Tecnológicos, Centros de Formación Profesional y Continua, Universidades, empresas privadas y Centros de innovación de Francia, Eslovenia, Italia, Holanda, Bélgica, Polonia y Alemania. La representación española la conforman la Universidad Politécnica de Cartagena, el Servicio de Empleo y Formación de la Región de Murcia (SEF), el cluster AMUEBLA (Murcia), el cluster CENFIM (Cataluña), y el Centro Tecnológico del Mueble y la Madera de Murcia, coordinadores del proyecto.

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