Jean Laurent: El jaspeador que retrató la España más romántica
El Ministerio de Cultura pone a disposición del público más de 6.300 imágenes digitalizadas del fotógrafo francés que mejor plasmó los usos y costumbres de la sociedad decimonónica
El Museo del Romanticismo y el Ministerio de Cultura acaban de poner a disposición del gran público más de 6.300 imágenes el archivo visual ... español más importante del siglo XIX, el de Jean Laurent (Garchizy, 1816-Madrid, 1886), una de las personalidades más importantes de las fotografía decimonónica española. Un legado,https://www.culturaydeporte.gob.es/cultura/areas/museos/mc/ceres/catalogos/catalogos-tematicos/jean-laurent/catalogo.html, que ha favorecido el estudio, debate, conocimiento y difusión de las formas de vida y las manifestaciones culturales del siglo XIX. Jean Laurent fue un testigo excepcional de los progresos sociales, culturales, industriales y económicos que estaban teniendo lugar en la España del Romanticismo, con sus abismales contrariedades.
En torno a 1855, recuerdan los catalogadores, comenzó una serie de fotografías 'd'après nature', en las que se aprecia una preparación muy cuidadosa de escenas, atendiendo a todos los detalles, desde el escenario hasta los trajes y otros objetos de uso cotidiano, destacando la utilización de la luz natural en todas las imágenes. Muchas de ellas tomadas en Murcia, Cartagena, Orihuela y otros municipios, que forman parte de los fondos del Museo del Traje-Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico y de otras colecciones. Era una Murcia en la que las carretas iban atestadas de tinajas, donde el agua corría por acequias abiertas por el centro histórico, donde la huerta era aún una arcadia en la que no había vehículos motorizados sino paisanos a lomos de borricas y no había casoplones sino barracas.
Laurent es uno de los fotógrafos más estudiados, un pionero en aquellos primeros momentos de un arte que hoy en día vive una revolución sin precedentes. Fancés afincado en España, su compromiso con esta nueva técnica le llevó a organizar su propio estudio, con el que llevaría a cabo una de las empresas más importantes: dejar para la posteridad testimonio gráfico de una sociedad, de sus formas de organizarse, de sus modos de habitar un territorio... una ventana al mundo a la que hoy nos asomamos con gran curiosidad.
Laurent murió en 1886 con el convencimiento de que había logrado hacer algo para la eternidad. Así es como hay que acoger todo este patrimonio que el Ministerio de Cultura ofrece ahora, y que es fruto de la celosa custodia de muchas otras manos. En 1900 la colección de Laurent pasó a manos de José María Lacoste, en 1915 a Juana Roig y en 1930 al fotógrafo Joaquín Ruiz Vernacci. El Estado compró en 1975 el archivo, constituido por cerca de 12.000 negativos de vidrio, que se conserva en la actualidad en el Instituto de Patrimonio Cultural de España. Numerosas colecciones públicas y privadas, tanto de nuestro país como en el extranjero, cuentan con imágenes de Laurent. Muchas de ellas localizadas en la Región de Murcia.
Laurent abandonó su Francia natal para instalarse en Madrid, donde aparece ya en 1844 como maestro jaspeador especializado en artículos de lujo, recuerda el Ministerio en su presentación del catálogo. «Es posible que conociera la reciente invención de la fotografía a través de su cuñado, Benjamin Pépin, que ejercía de fotógrafo en la Bretaña francesa. Sea como fuere, en 1855 ya obtiene un privilegio de invención para la aplicación de color a las fotografías y un año más tarde abre un establecimiento fotográfico en la azotea del número 39 de la Carrera de San Jerónimo, espacio que había pertenecido a otro importante fotógrafo, Charles Clifford».
Del retrato pasó cada vez a asumir más frentes y posibilidades, ampliando el campo de acción para rentabilizar el negocio, contando con operarios y fotógrafos que le permitieron realizar fotografías de ciudades y monumentos, de espectáculos o de los nuevos caminos de hierro. Recuerdan los organizadores del fondo que en 1860 la reina Isabel II le nombró fotógrafo de cámara y en 1861 publicó el primero de sus catálogos comerciales, que incluye retratos de los personajes más notorios de la época y que fue ampliándose en los años sucesivos. También abrió una tienda en París para comercializar su trabajo.
En 1869 enviudó, y tuvo que reorganizar la empresa, creando en 1874 la sociedad J. Laurent y Compañía, en la que figuraban tanto él como Catalina Dosch, su hijastra. El marido de Catalina, Alfonso Roswag, tomó cada vez más protagonismo, «publicando en 1879 un catálogo con formato de guía de viajes fruto de una de las labores de coleccionismo de imágenes más ambiciosa».
En 1881 Laurent cedió la empresa a Catalina Dosch, siendo Roswag el encargado de su gestión. En ese periodo trasladaron la sede a un edificio diseñado por Ricardo Velázquez Bosco en el madrileño barrio de Pacífico, que aún se mantiene hoy en día, aunque como sede de un colegio.
Buscador por provincias
Quienes accedan al catálogo encontrarán casi 3.000 fondos de la Casa Laurent que conforman inicialmente este proyecto con unas categorías básicas según los temas más representados en el archivo: Retratos (fotos de gabinete, generalmente en formato 'carte de visite'), Tipos Populares (representación de las distintas localidades a través de sus gentes y permite también buscar por provincias), Imagen de España (vistas de ciudades como Murcia y Cartagena, monumentos y obras de ingeniería que dan una visión completa de la España decimonónica), Bellas artes, artes decorativas y arqueología (bienes culturales que dieron lugar a las series A y B de los catálogos de la empresa) y Varia (toros o exposiciones nacionales). Un viaje en el tiempo sorpresivo y fascinante.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión