Piel fina

Sin acritud, de verdad, con todo el decoro, el amor, el civismo, la honradez, la justicia, la pasión, la humildad, el conocimiento de causa, el estudio de la historia y de las razas, las clases, las bases, el arte, las disputas, las geolocalizaciones, los territorios conquistados, perdidos, ganados o soñados, embargados, el despropósito, el desastre, la falta fatal de ecuanimidad, el ardor, la lucha, la brega, los vencidos, los caídos, los vencedores, los antiguos, los nuevos, los de siempre, la mierda, el vicio, el suplicio, la castidad, la locura, los sexos nuevos y viejos, la vida, la ciudad, el campo, los animales, los animalistas, las traiciones, las tradiciones, los tradicionalistas, las listas, los listados, las compras, los auténticos defensores de la ley, los desprestigiados, los huidos, los hundidos, los parados, los de un lado, los de otro, los de más allá, los del recuerdo, los que están por llegar, los amigos, los cabrones, los listos de más, los tontos del colegio, la gentuza, la gentucilla, la gente buena, los increíblemente acertados en nuestra opinión, los que, joder, maldita sea, otra puta vez, nos equivocamos, los que no hay manera de que suelten prenda, los chivatos, los piezas de museo, los directores de museos de piezas, los que no hay manera de hacer callar, los que como yo, hablamos lo justo, mal, rápido y sin vocalizar. Los músicos, los artistas, los toreros, los bañistas, los deportistas, los periodistas, los maestros, los policías, los catalanes, los franceses, los murcianos, los romanos, los europeos, los yonquis, los yanquis, los tranquis, los de siempre, los que por primera vez, las chicas, los chicos, las feministas, los feministas, los machistas, los que tenemos razón, los que no la tenemos, los lanzados, los creídos, los descreídos, los absolutistas, los individuos, los valientes, los cobardes, los ricos, nosotros. Todos, todos, todos y cada uno. Digo en voz alta, todos, de verdad, todos. De cada bando, de cada banda, de cada color. ¿No nos duele todo demasiado, no nos ofende todo demasiado, no estamos todos siendo demasiado maltratados, agraviados, vilipendiados? ¿No estamos últimamente con la piel demasiado fina? Digo yo, sin acritud.