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CARMEN ORTÍN
Miércoles, 8 de julio 2015, 01:02
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«No pararemos hasta conseguir la apertura de la residencia de Ampy lo antes posible». Así de contundente se mostró ayer el alcalde de Yecla, Marcos Ortuño, que mostró su apoyo y respaldo absoluto al proyecto de la residencia de la Asociación de Discapacitados Psíquicos de Yecla (Ampy), «porque se trata de una legítima reivindicación de esta agrupación volcada con los afectados de esta localidad».
Ortuño mostró su adhesión al proyecto de la asociación. «Nosotros hemos ayudado siempre a Ampy y vamos a seguir haciéndolo. Jamás le hemos dado la espalda y le ayudaremos en todo lo que nos sea posible, porque soy fiel a mis promesas y antes molestaré a cualquier político regional o nacional, sea o no de mi partido, que defraudar a un solo yeclano». El primer edil asume personalmente la reivindicación de la asociación y asegura que «no pararemos, no vamos a cejar en nuestro empeño de ver esta residencia abierta y en funcionamiento lo antes posible».
Marcos Ortuño anunció que ya tiene previsto entrevistarse con la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, y su equipo directivo, para abordar este problema y «lograr una solución inmediata». El regidor reconoce que durante los últimos años Ampy ha trabajado de una forma muy dura para conseguir, en primer lugar, construir esa residencia tan demandada por la sociedad yeclana. Además de dotarla del equipamiento necesario para ponerla en marcha. El primer edil recuerda que el Ayuntamiento destinó el pasado año 200.000 euros a Ampy, al tiempo que asesoró a la asociación para que consiguiera una subvención proveniente de fondos europeos de otros 100.000 euros.
38 discapacitados
La residencia se encuentra terminada desde hace cinco años y ha sido construida por Ampy, con la ayuda de distintas subvenciones de la administración pública, además de otras aportaciones económicas. Está diseñada para 38 personas con discapacidad psíquica y necesita de la concertación con el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS) de un veintena de plazas, para poder ponerla en marcha y hacer viable su financiación económica.
Solo falta este trámite, puesto que ya cuenta con las acreditaciones legales correspondientes. Pero, su apertura se ha atrasado hasta principios de 2016, ante la obligación legal de la Administración regional de tener que sacar y conceder esas plazas concertadas a través de un concurso público que dote de más transparencia a la gestión pública.
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