«Este Gobierno va un poco lento en algunas cosas»

Aunque abandonó la actividad política en 2007, Josep Piqué sigue expresándose con la cautela y la habilidad escapista de un político. Exministro en los gobiernos de Aznar, expresidente de Vueling, a este catalán de 58 años la vida le acaba de dar un susto en forma de hemorragia cerebral, justo cuando promocionaba su libro 'Cambio de era'.

- Lo primero es la salud. ¿Cómo se encuentra?

- Plenamente recuperado, trabajando a tope, haciendo ejercicio: treinta o cuarenta minutos de aeróbicos, correr, bicicleta, elíptica... Afortunadamente, ha sido muy leve. Los médicos dicen que lo que me conviene es recuperar mi vida normal y en ello estoy.

- Vamos, que no le han quitado el jamón.

- No. Eso sí que sería una desgracia, ja, ja, ja...

- Vida normal significa ejercer de vicepresidente segundo de OHL.

- Así es. Ya estoy incorporado al cargo desde el 1 de octubre.

- A su empresa la han denominado 'la constructora cabecera del PP', por su adjudicaciones.

- Tonterías se dicen muchas y esa es una de ellas.

- Es uno de los grandes directivos de España. ¿Ésa era su meta?

- Una de mis metas en la vida es hacer cosas interesantes y si además pueden ser importantes, mejor. Esta ocupación colma mis expectativas.

- De pequeñito era comunista...

- Si a los veinte años, como dice el tópico, no eres comunista es que algo te pasa...

- ¿Lo hizo para fastidiar a su padre, alcalde en el franquismo?

- A esa edad se hacen cosas no para fastidiar sino porque uno cree en ellas. Además, hace cuarenta años que soy liberal.

- En su libro habla de un mundo en movimiento de Norte a Sur y de Oeste a Este...

- Es una gran transformación histórica que nos obliga a cambiar. Si no, nos quedaremos atrás.

- ¿Cambiar cómo? ¿Renunciando al Estado de bienestar?

- Los enemigos de la globalización utilizan ese argumento. Pero ahora se están incorporando a la prosperidad miles de millones de personas. Nosotros podremos mantener el Estado de bienestar pero a un nivel más racional, porque parte de él descansa sobre situaciones insostenibles.

- ¿Los sueldos han bajado como dice Rajoy o han subido como sostiene Montoro?

- Los economistas solemos tener argumentos para todo...

- Celebro que lo admita.

- Si hablamos de los convenios colectivos firmados este año es cierto que hay un ligero incremento. Pero si hablamos del indicador, que a mí me parece pertinente a estos efectos, que son los costes laborales unitarios, Rajoy sin duda tiene razón.

- ¿Miente entonces Montoro?

- No diría eso. Simplemente se ha referido a un indicador distinto del que yo he utilizado.

- ¿Ve bien a este Gobierno?

- Yo personalmente apretaría el acelerador en algunas cosas. En mi opinión van un poco lentos.

- Como expresidente del PP catalán, ¿cree que se equivoca Alicia Sánchez Camacho al hablar de singularidad?

- Hace siete años que abandoné la actividad política y no voy a entrar en debates coyunturales. A mí lo que me preocupa es cómo convencer a muchísimos catalanes de que lo que más nos conviene es seguir en España.

- Dice que hay que darle una 'pensada' a la Constitución. ¿Qué le cambiaría?

- No es mi papel decir cómo hay que reformarla. Pero la Constitución actual se hizo en el año 78, cuando no habíamos oído hablar de Internet ni había caído el Muro de Berlín.

- Una ley tan importante como la de educación acaba de aprobarse solo con los votos del PP... ¿Eso está bien?

- No. Tendría que haberse consensuado, pero como todas las leyes de educación anteriores. Esa falta de consenso es uno de nuestros grandes fracasos colectivos.

- ¿Qué opina de la irrupción de Femen en el Congreso?

- Me cuesta mucho hablar de anécdotas irrelevantes.