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Anabel Martínez, Elena Córdoba, Aida Belmonte, Juana González y Geni Vicente.
De pinchos con el paraguas

De pinchos con el paraguas

Los preparativos de los traslados de los apóstoles y las ganas de fiesta pudieron con la lluvia, que no dio tregua al aperitivo

Antonio López

Miércoles, 23 de marzo 2016, 01:46

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La incesante lluvia del mediodía no fue suficiente para que cientos de vecinos, visitantes y turistas perdieran las ganas de disfrutar del ambiente procesionista que se vive a la hora del vermut en el casco antiguo. Esta vez se dejó ver poco en la calle y mucho en el interior de los bares y restaurantes, donde muchos cofrades se juntaron a comer tras los actos de entrega de distinciones en el Parque de Artillería y en el Arsenal.

También fueron escenario para el reencuentro de viejos amigos que en muchas ocasiones solo se ven en estas fechas. Fue el caso de Sergio y Alberto Guillén y Clara Smilg, que salieron a tomar una tapa por los bares de la Plaza Juan XXIII con Ana Guijarro y Jesús Díaz, ambos de Madrid. «Venimos todos los años a ver a la familia y a los amigos. Soy de la Cofradía Marraja y vivo las procesiones como si fuera un cartagenero más», dijo Jesús.

Lo que sí enturbió la lluvia fue el negocio de los feriantes de esa plaza y los del solar del antiguo Convento de las Siervas, que solo pudieron abrir las atracciones y los juegos infantiles pasadas las cinco de la tarde, cuando la lluvia dejó paso al trasiego multitudinario de procesionistas y portapasos hacia sus lugares de partida de los traslados. Igual les ocurrió a los vendedores ambulantes.

De La Manga al centro

A pesar del mal tiempo, por el centro se dejaron ver muchos turistas, como los que acompañaban Flori Meca y Francisco Nieto. «Conocimos a Akir Fernand y Dominique Akir, ambos franceses, hace 40 años veraneando en La Manga, y ahora han regresado a conocer nuestra Semana Santa. Espero que la lluvia nos dé tregua y podamos enseñarles nuestros desfiles pasionales», dijo él.

Otro que pasará la semana en Cartagena es el colombiano Federico Palomino, junto a sus amigos María García, Carmen Hernández y Marta Gutiérrez. Juntos salieron a tomar el aperitivo, estos por la calle Puerta de Murcia. «Vivo en Aranda de Duero (Burgos) y es la segunda vez que vengo por estas fechas. Da igual que llueva o haga frío, estos días son para estar con los amigos y pasarlo bien», comentó.

Pero si habría que destacar a unos visitantes esos son los madrileños, como Raúl Sánchez, que a pesar de la lluvia salió a pasear y a comer al restaurante El Callejón, en la calle La Palma. «Intento venir todos los años, porque me gusta vivir este ambiente procesionista. Para que sean perfectas estas vacaciones, solo falta que nos acompañe el tiempo», contó.

Donde más ambiente hubo fue en los alrededores del Parque de Artillería, donde se reunieron hermanos, militares y colaboradores de la Agrupación de San Juan Californio, y del Arsenal, donde los sanpredistas acudieron a sus actos previos al traslado de la imagen hasta Santa María de Gracia. También hubo trasiego de vecinos y turistas por la Plaza del Ayuntamiento, la calle Jara, Aire y Cañón, sobre todo, por la tarde en los locales de copas.

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