Borrar
España tira de orgullo
FÚTBOL

España tira de orgullo

Navas evitó la derrota en el descuento ante una pujante y Chile que sigue sin poder con su ‘bestia negra’

IGNACIO TYLKO

Miércoles, 11 de septiembre 2013, 00:56

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Aunque Navas salvó los muebles en el descuento, cuando los chilenos ya estaban agotados por su enorme esfuerzo, amistoso inquietante para la selección española en la fría Ginebra, donde volvió a quedar patente que a los campeones europeos y universales no les van este tipo de partidos. Al final suelen sacar el orgullo del ganador, pero no se motivan lo suficiente y se emplean casi siempre con menos intensidad que el adversario, en esta ocasión una Chile pujante que en su forma de presionar recordó a la Brasil de la final de la Copa Confederaciones. Este duelo trampa, presentaba varias incógnitas que no se despejaron favorablemente para los intereses españoles. Y eso que el arreón final dejó un buen sabor de boca.

En primer lugar, es triste ver al mejor combinado nacional del planeta jugar casi en familia. Es cierto que renunciar en estos tiempos a dos millones de euros supone casi un insulto, pero el coqueto estado de Ginebra apenas registraba media entrada. Tendrá que pensar la Federación Española de Fútbol, que presume de una buena gestión económica, si no compensa perder algo de dinero a cambio de dar satisfacción a a seguidores de ciudades pequeñas del país. Un ambiente tan frío en todos los sentidos no invita a competir a futbolistas que lo han ganado todo.

La segunda pregunta consistía en saber cómo respondería un equipo con bajas fundamentales, sobre todo en el centro del campo, ante un contrincante de mucha más enjundia que Finlandia. Más allá del resultado, España no dio la talla. Salvo en el tramo final, le faltaron ritmo, intensidad, contundencia defensiva, jerarquía para dominar el centro del campo y profundidad por los costados. Se vio casi siempre minimizada ante la presión del adversario, que jugó con cinco atrás pero dos laterales como Isla y Mena que se convirtieron en extremos.

Muchas miradas se centraron en la portería. Aunque es indiscutible el gran momento por el que atraviesa Víctor Valdés, básico en el Barça a pesar de jugar con la presión añadida de saber que es su último año, no estuvo afortunado. No se le puede culpar pero pudo hacer algo más en los dos goles encajados, sobre todo en el primero. Igual que sus compañeros en la zaga, se quedó mirando como remataba Vargas. Tiene que resultar difícil motivarse sabiendo que el técnico solo cuenta contigo para los amistosos.

Y sigue preocupando el estado de Xavi, sobre todo pensando en el futuro. En el Barça llegó a ser suplente incluso en Valencia, lo que supuso una decisión sorprendente del Tata Martino, pero el cerebro no está fino. No es normal verle fallar hasta pases fáciles que se pierden fuera de banda. A un superclase como él, conviene dosificarle si se le quiere tener a punto en el Mundial de Brasil. De hecho, no salió en la segunda mitad. Y, curiosamente, España mejoró su prestaciones.

Seis cambios

El de Helsinki era oficial pero el de Chile era más complicado. El rival demostró por qué está virtualmente clasificado para el Mundial y ha ganado cuatro partidos consecutivos en su zona. El combinado de Jorge Sampaoli es corajudo, muy profesional, con cierta clase y un jugador como Vidal que marca diferencias. El centrocampista de la Juventus es de los más completos el momento por dinamismo, polivalencia y técnica.

Del Bosque presentó un equipo con seis cambios en relación a Finlandia. Solo repitieron los centrales Ramos y Albiol y los azulgrana Xavi, Cesc y Pedro. Era una buena ocasión para que Javi García se mostrase en ausencia de Xabi Alonso y Busquets. No aportó más que Mario Suárez ante los nórdicos. Todo el grupo estuvo por debajo de su nivel y quedó mucho tiempo a merced de una Chile siempre más intensa. No ayudó en nada el tempranero gol de Varun goleador agresivo del Gremio que apenas pudo jugar en el Nápoles. Se aprovechó de un error de Ramos, que se quedó enganchado en la salida, para abrir el marcador.

A España le costó nadar a contracorriente, zafarse de una presión atosigante y fabricar buen fútbol. Empató por vez primera en su mejor combinación. Xavi abrió a Pedro y el magnífico centro del tinerfeño lo cabeceó Soldado. El balón le fue a Bravo pero al portero realista no le dio tiempo a desviarlo bien. Un centro-chut de Cesc se estrelló en el travesaño. La situación mejoraba pero antes del descanso Vargas aprovechó otra distracción. Recibió de espaldas pero Albiol estuvo blando e inocente. Le superó y su tiro entró por debajo del cuerpo de Valdés.

Los cambios mejoraron a España y el inicio de la segunda parte ya fue prometedor, con disparo de Cazorla que desvió Bravo. El asturiano creció y con él se vino arriba la selección. Del Bosque buscó alternativas, sobre todo al introducir a un extremo puro como Navas y a su socio Negredo. Como en Helsinki, le salió bien esta apuesta. España lo intentó con más fe y supo combinar el juego en corto y en largo. Navas y Pedro avisaron antes de que el sevillano acertase en el descuento. De todos modos, solo será una cita inolvidable para Nacho, que debutó sustituyendo a Sergio Ramos, su ídolo. Los chilenos se lo tomaron como un test de cara al Mundial y salieron fortalecidos aunque después de diez partidos siguen sin poder ganar a su bestia negra.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios