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Malestar en La Alcayna con la CHS por el riesgo de incendio de una rambla

Los arbustos se acumulan sin control por el cauce de Las Monjas y la entidad de conservación pide por carta al organismo de cuenca que lo limpie

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Lunes, 25 de junio 2018, 08:31

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Un polvorín. En eso se ha convertido la Rambla de Las Monjas para los residentes de la urbanización La Alcayna de Molina de Segura, los cuales miran con preocupación como la masa arbustiva se extiende sin ningún control, en pleno verano y con el plan Infomur activado por el riesgo de incendios, convirtiéndose en el combustible perfecto para propagar las llamas cerca de sus casas. De hecho, en un escrito del pasado 18 de junio, la presidenta de la entidad urbanística de conservación de La Alcayna, Ana Huidobro, advierte a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) que «son numerosas las quejas de los vecinos».

Juan, uno de los jardineros empleados por la entidad, recuerda que la rambla separa las urbanizaciones de La Alcayna y Los Olivos y uno de los tramos «más inseguros» es el que comunica las urbanizaciones. Los propietarios de La Alcayna justifican su preocupación por los dos incendios ocurridos en junio de 2016, uno de los cuales fue provocado por la imprudencia de un menor y acabó calcinando 5.000 metros cuadrados de arbustos y cañizos, después de que el fuego se acercase a varias viviendas.

Para la entidad es el momento de actuar porque las altas temperaturas, a su juicio, «pueden originar cualquier desastre». Y recuerdan que en la urbanización hay 2.245 parcelas, 1.900 casas y residen más de 7.000 vecinos.

El nulo mantenimiento del ramblizo favorece que proliferen focos de mosquito tigre cerca de la zona residencial

«El riesgo de incendio podría evitarse si se ponen medios». La presidenta de la entidad urbanística de conservación explica que hace tres años propusieron a la CHS acometer una limpieza en los tramos más conflictivos de la rambla, utilizando recursos propios de la entidad, pero el organismo de cuenca les exigió un proyecto sobre las actuaciones que tenían previsto realizar. Esta condición les hizo desistir.

La entidad exige al organismo de cuenca que se adecente «urgentemente» esta rambla que recorre La Alcayna y otras urbanizaciones, como Los Olivos y Los Conejos, no solo para prevenir posibles incendios, sino también por razones de higiene y seguridad. La proliferación de gran cantidad de plantas invasoras a lo largo del cauce de Las Monjas también está perjudicando a la flora autóctona y se han detectado focos de mosquito tigre, así como otros tipos de insectos, que están anidando en la zona ante la falta de trabajos de limpieza, mantenimiento y desbroce.

En la citada carta, Ana Huidobro expone que, en las condiciones actuales que presenta la rambla, tanto los vecinos como los visitantes «no pueden disfrutar de este espacio privilegiado, verde y saludable» y que el estado de abandono que presenta está «perjudicando al medio ambiente». La entidad urbanística de conservación lamenta que «disponemos de un espacio privilegiado del que no podemos disfrutar sin poner en riesgo nuestra salud y todo ello porque en los últimos años no se ha intervenido por parte de la Confederación Hidrográfica para dar una solución efectiva a este problema». Desde la entidad, recuerdan al organismo de cuenca que ellos han realizado 72 fumigaciones, a las que hay que sumar las acometidas por la empresa que presta el servicio al Consistorio molinense.

Ocho robos en seis meses

La acumulación de maleza, según explican algunos vecinos desde el anonimato, «facilita el acceso por la rambla a los amigos de lo ajeno y esta circunstancia puede ser aprovechada para robar en viviendas, sobre todo en la zona que comunica con la vecina urbanización de Los Olivos». Por ello, la presidenta de la entidad considera que «una forma de disuadir a los cacos sería tener el cauce despejado y limpio de maleza».

En seis meses se han producido ocho robos en domicilios de La Alcayna. La entidad considera que la estadística no es alarmante, pero opina que una forma de prevenir la visita de los ladrones es garantizar un buen mantenimiento de la Rambla de las Monjas. «También habría menos desgaste policial», apunta Ana Huidobro. Pone como ejemplo que «no sería necesario patrullar tantas veces si la rambla estuviera limpia y despejada de malezas».

¿Puntos de luz nuevos?

Desde la Concejalía de Vía Pública avanzan a 'La Verdad' que el Ayuntamiento de Molina de Segura está estudiando la instalación de cuatro puntos de luz en uno de los tramos de la rambla, en concreto en la parte que conecta las urbanizaciones de Los Olivos y La Alcayna. La edil responsable de este área, Fuensanta Martínez, también «apremia» a la CHS a limpiar todas las ramblas del término municipal.

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