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Protesta en una de las obras que se hicieron tiempo atrás para la modenización de los regadíos.
La asfixia económica pone a 4.000 regantes al borde del precipicio

La asfixia económica pone a 4.000 regantes al borde del precipicio

El Heredamiento y la oposición reclaman que se inviertan los 400.000 euros presupuestados para la modernización de los regadíos

JUAN LUIS VIVAS

Domingo, 26 de marzo 2017, 00:03

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«Rincones muy oscuros y muchas preguntas sin respuesta». Así describió la situación en un reciente comunicado Cambiemos Molina, tras reunirse sus concejales con el diputado nacional de Podemos, Javier Sánchez, y representantes del Heredamiento Regante de Molina. La entidad que representa a más de 4.000 comuneros de Molina, Lorquí y La Algaida ve cómo pasa el tiempo y se asfixia económicamente.

El Heredamiento se ha reunido en las últimas semanas con dirigentes de PSOE, Podemos y C's, así como con representantes de los Consistorios afectados. «Vamos a pedir las reuniones que sean necesarias con la Consejería de Agricultura y a pedir el apoyo de nuestros grupos parlamentarios», señala Antonio López, edil de Agricultura en Molina.

Lo que demanda por enésima vez el Heredamiento es que se invierta la partida incluida en los Presupuestos Generales del Estado de 2016, 400.000 euros, necesarios para ejecutar el resto de las obras y poner en marcha finalmente toda la infraestructura de modernización de regadíos. «Sin esas obras la viabilidad de la comunidad resulta muy dudosa», dice Antonio Carrillo, secretario del Heredamiento Regante.

Por otro lado, hay diferentes frentes abiertos sobre la financiación de unas obras que «se han desbocado y que los regantes se ven obligados a soportar por imposición de las administraciones públicas». Además, denuncia «la omisión de la atención que estamos reclamando de las mismas en cuanto a la desproporción que hay con respecto a otras comunidades de regantes», aludiendo directamente al Ministerio y a la Consejería de Agricultura. Los regantes denuncian «irregularidades» en las obras de modernización de los regadíos, que han originado sobrecostes de hasta 30.000 euros por hectárea, cinco veces superior al coste de otras obras similares. Es decir, el proyecto que data de 1996 se cifró inicialmente en algo más de 12 millones y ha costado en torno a 52 millones.

Preguntas a Madrid

«¿Por qué se está permitiendo que una obra de tal envergadura no se finalice mientras que se tolera que el material, pagado con el dinero de todos, se deteriore debido a la falta de uso y mantenimiento?», se preguntan desde Podemos. La formación morada ha llevado este problema a Madrid, registrando una pregunta en el Congreso de los Diputados y apelando al Ministerio de Agricultura a que tome cartas en el asunto. «Pedimos que se levante el embargo, tal y como la Consejería de Agua y Medio Ambiente prometió a los regantes», afirmó el diputado murciano, Javier Sánchez, tras reunirse con los regantes. El colectivo protestó en octubre ante la Asamblea Regional, y la diputada socialista Yolanda Fernández afirma que «los compromisos no se han cumplido, encontrándose a día de hoy exactamente igual que hace unos meses, con las cuentas bancarias y vehículos embargados». C's está a favor de la ejecución de la partida presupuestaria para la conclusión total de las obras. Incluso los regantes se plantearon la posibilidad de acometer ellos mismos el final de las obras mientras no se libere la partida presupuestaria, pero Acuamed debe autorizarlo.

La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, alcanzó un acuerdo en octubre para la solicitud de fraccionamiento del reintegro (alargando el periodo de pago con aportación de garantías), y la firma de un convenio para gestionar la recaudación ejecutiva del Heredamiento, lo que permitiría mejorar esta situación.

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