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Juan Luis Vivas
Martes, 20 de enero 2015, 01:37
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A cuatro meses de las elecciones municipales, el alcalde, Eduardo Contreras, hizo balance de su gestión durante la legislatura en un acto institucional que, inicialmente, iba a ser de partido y al que estaba previsto que asistiera el presidente de la Comunidad Autónoma, Alberto Garre. Finalmente no fue, y desde San Esteban se justificó en que hubo «un error» al incluir el acto en la agenda.
Pese a la ausencia de Garre, Contreras estuvo muy bien arropado, flanqueado por los consejeros de Presidencia y Empleo, José Gabriel Ruiz, y de Industria, Empresa, Turismo e Innovación, Juan Carlos Ruiz, además de otros representantes locales y regionales. Todos los concejales del PP, directores generales como Luis Gestoso, Leopoldo Navarro y Juan Castaño, e incluso el exdirigente de Alianza Popular y fundador del Partido Demócrata España, Juan Ramón Calero, entre otros, siguieron con atención las explicaciones de Contreras.
También estaba el delegado del Gobierno, Joaquín Bascuñana, natural de Molina, sobre el que se posaron todas las miradas cuando el discurso de Contreras dio un giro y, durante varios minutos, versó sobre corrupción e imputados. El alcalde se mostró partidario de que los imputados no puedan ir en las listas electorales, una propuesta que incluso cuenta con la ratificación del Pleno. Además, defendió a personas que han sido «injustamente» imputadas, dimitiendo a las primeras de cambio, en una clara referencia a la exedil de Molina y ex directora general de Turismo, Mariola Martínez.
No era un acto electoral, pero parecía el pistoletazo de salida de la intensa campaña que se avecina. Y también parecía la puesta en escena ideal para que Contreras, alcalde desde 1995, anunciara si se queda o se va, pero él mismo adelantó que no iba a desvelar decisión alguna con respecto a su continuidad como candidato. Y reiteró, como indicó recientemente a 'La Verdad', que «tiene que decidirlo mi partido».
«Eduardo Contreras es un ejemplo a seguir», resaltó escuetamente su amigo Juan Carlos Ruiz poco antes de iniciar el acto. Más prolijo fue el consejero José Gabriel Ruiz, a quien encargaron la tarea de cerrar el evento. «El Ayuntamiento de Molina es el más transparente de la Región», señaló el responsable de Presidencia. Ruiz remarcó que, merced a la gestión de Contreras, el de Molina es un Consistorio «comprometido con el empleo y los servicios públicos».
Precisamente sobre empleo comenzó hablando el regidor, para destacar los 834 empleos netos creados en el municipio el pasado año. También habló de asignaturas pendientes, como el proyecto de interconexión de ramblas para luchar contra las lluvia s torrenciales, cuya gestión inició hace doce años. Reconoció que le ha podido faltar «influencia política», demandando más compromiso y «voluntad política» del resto de administraciones, a las que también pidió apoyo para desarrollar suelo industrial.
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