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Martes, 19 de diciembre 2017, 10:50
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Saturada, obsoleta y lenta. Así se encuentra la línea de los trenes de cercanías Murcia-Alicante, que mueve más de 2,7 millones de viajeros al año. El precario estado de este eje -uno de los más transitados de España- viene reflejado en el Plan de Mejora de la Calidad de Cercanías en la Comunidad Valenciana, presentado ayer por el ministro Íñigo de la Serna en Valencia.
El servicio de esta línea estará condicionado a partir del año que viene con la llegada del AVE a Murcia, ya que estos trenes utilizarán una parte del nuevo trazado de alta velocidad hasta Albatera, y para el resto del trayecto emplearán el recorrido actual por Elche, con vía única de ancho nacional y sin electrificar. Adif aseguró semanas atrás que no habrá transbordos de viajeros en Albatera a causa de la diferencia de trazados en la misma línea.
El plan presentado por el ministro prevé una inversión de 1.436 millones de euros para mejorar las redes de cercanías en la Comunidad Valenciana, de los que 85 se destinarán a conectar la línea Murcia-Alicante con el aeropuerto de El Altet.
Se trata de la variante de Torrellano, de 7 kilómetros de longitud. El proyecto lleva muchos años en agenda sin que haya visto la luz. Está vinculado a la modernización de este tramo y a la intermodalidad del aeropuerto de la comunidad vecina, que está en clara competencia con el aeródromo murciano de Corvera. El alcalde de Elche, el socialista Carlos González, afirmó que el enlace ferroviario con su aeropuerto «es una necesidad estratégica» para el desarrollo socioeconómico de su municipio y de sus empresas, informa Efe.
Adif también prevé invertir 34 millones de euros para conectar Elche con su nueva estación de alta velocidad que se ubica en la zona norte de Carrús, con un tramo de vía doble de 3,8 kilómetros.
El diagnóstico que hace el Ministerio de Fomento sobre el servicio que se presta actualmente en la línea Murcia-Alicante señala que es necesaria la incorporación de 15 nuevos trenes para sustituir a los actuales, que se encuentran obsoletos. En estos incluye también a los que prestan servicio en la línea Murcia-Lorca-Águilas. El viejo material rodante -trenes de las series 592- es otra de las asignaturas pendientes, cuya modernización dependerá de una compra de nuevas unidades por parte de Renfe.
El informe deja constancia de que se trata de una de las líneas más saturadas. También destaca que se ha producido una pérdida de puntualidad de los trenes entre Murcia y Alicante. Dicha merma ha sido paulatina en los últimos cinco años. La mayor puntualidad se alcanzó en 2014, con un 95,98%. El año pasado fue del 95,2%; y este año ha caído al 89,6%, debido a los conflictos por las obras para el soterramiento de las vías en Murcia.
El ministro Íñigo de la Serna destacó el «trabajo intenso desarrollado en los últimos meses para elaborar, de la mano de Adif y Renfe». El plan se llevará a cabo entre 2017 y 2025 aunque, como expuso De la Serna, se prevé desarrollar «el grueso» de las actuaciones en 2022. De las 45 actuaciones previstas en la Comunidad Valenciana, 40 se harán en el periodo 2017-2022.
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