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Pared de piedra de la torre número 9, junto al Porche de San Antonio, la única puerta que queda de las que daban acceso a la vieja ciudad. agm P Alonso / AGM
El Ayuntamiento de Lorca proyecta sacar a la luz otro tramo de la muralla medieval

El Ayuntamiento de Lorca proyecta sacar a la luz otro tramo de la muralla medieval

La iniciativa municipal abarca la puesta en valor de 280 metros del recinto fortificado ocultos en las calles Zapatería y Cava

PILAR WALS

LORCA

Domingo, 12 de noviembre 2017, 09:53

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Hubo un tiempo en que la ciudad estaba amurallada. La cerca medieval estaba compuesta por grandes lienzos de piedra a los que se adosaban torres. Sin embargo, a comienzos del siglo XVI la ciudad avanza y la muralla queda engullida a uno y otro lado por construcciones que terminan ocultándola. Las obras realizadas en muchos de estos inmuebles han permitido trazar un plano de la muralla medieval y situar en ella las distintas torres.

Unos 280 metros de muralla están ocultos entre las calles Cava y Zapatería. Sin embargo, podrían ir aflorando, ya que entre las pretensiones del Consistorio está recuperar lienzos de muralla y torres para ponerlas en valor, como se ha hecho en los últimos años con varios tramos y fortificaciones. «Vamos a intentar recuperar la vieja muralla, lo que nos permitirá mostrar el trazado de la ciudad medieval», afirmó el alcalde, Fulgencio Gil Jódar. Para ello, dijo, no se construirá en varios solares municipales adosados a la cerca medieval. Estos espacios se sumarán a otros que han quedado vacíos y han sido vallados a la espera de que algún día pueda mostrarse de forma generalizada la fortificación.

En los últimos años el esfuerzo ha sido importante, ya que en el barrio de San Juan 190 metros de muralla construida entre los siglos XII y XV fueron rehabilitados, posibilitando incluso su visita y recorridos sobre ella. «El resultado ha sido magnífico, por lo que nos da pie a continuar trabajando en esta línea», indicó Gil Jódar. Las actuaciones tras el terremoto de mayo de 2011 permitieron la puesta en valor de la Torre Rojano, frente al antiguo archivo municipal, la número 9 y el Porche de San Antonio, la única puerta que queda de las que daban acceso a la ciudad en el recinto de murallas creado en la época de la Reconquista. Está datada en el siglo XIV.

En su mayor parte, la cerca está tapada por viejos y nuevos edificios

Las mercedarias y la Colegiata

Adosadas a la muralla están construcciones como el convento de las mercedarias (siglos XVII-XVIII), el colegio de la Purísima (siglo XVIII), la Colegiata de San Patricio (siglo XVI-XVIII) sobre la iglesia medieval de San Jorge (siglo XV), la Casa del Corregidor (siglo XVIII), el Pósito de Panaderos (siglo XVI) y el Pósito de Labradores, antigua cárcel (siglo XVIII). Más recientemente se levantaron bloques de viviendas que han evitado adosarse a la muralla y que las han integrado de forma que los lienzos puedan ser visionados.

Es el caso de un edificio junto a la Colegiata de San Patricio, en la calle Cava, que en su planta baja -destinada al aparcamiento de los vehículos de sus vecinos- muestra en una especie de patio la antigua muralla. Igual ocurre en otros construidos hace algunos años. En los patios vecinales se pueden contemplar los lienzos de la cerca medieval. Las obras en San Patricio tras los terremotos dejaron al descubierto parte de la muralla, junto a la iglesia de San Jorge. En el suelo del templo, tras la restauración, se dejó un testigo para que los visitantes puedan contemplar su trazado. Integrada en la construcción también quedó la muralla en el remodelado convento de las Mercedarias que acoge el colegio Madre de Dios. Los lienzos se pueden contemplar en el que iba a ser gimnasio, reconvertido en museo, en la calle Zapatería, y en los patios de recreo, en la calle Cava. En este mismo lugar se encontraron tres torreones.

La torre número 9, a poca distancia del Porche de San Antonio, fue reconstruida después de que se hundiera en el año 2007 a causa de unas lluvias torrenciales. La Rojano, de los siglos XII y XIII, muestra sus dieciséis metros de altura originales y es visitable, gracias a las actuaciones tras los seísmos. Una excavación realizada en el año 2002 en la calle Cava, a la altura del número 17, posibilitó documentar un lienzo de muralla y dos torres islámicas.

El interés por la cerca medieval es importante. Las rutas guiadas que se han llevado a cabo para visitar los restos han contado siempre como masiva presencia de público.

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