Prohíben la música en una romería para no molestar a los búhos y los halcones

La carta ha caído como un auténtico jarro de agua fría en el colectivo de los caballistas Romeros del Cristo, entre otros motivos porque la Consejería notificó la prohibición el viernes por la tarde y ya tenían contratado un grupo musical para amenizar la jornada. De hecho, al suspender su presencia se han visto obligados a pagar la mitad del contrato a los músicos (400 euros).

Cristóbal Tomás, en nombre de la Peña Caballista Romeros del Cristo, integrada por más de cien personas, reconoció ayer que no entiende la decisión impuesta por Medio Ambiente y se preguntó: «¿Qué pasa cuando el Rocío pasa por Doñana?»

También criticó que «si lo que quieren es que la Romería de Jumilla desaparezca, lo van a conseguir, porque este tipo de cosas no son de recibo, y lógicamente en estas condiciones al año que viene no vendrá nadie». El presidente de la Hermandad del Cristo Amarrado a la Columna, Maximiliano Olivares, tampoco ocultó su malestar: «Estas cosas tiran por tierra el trabajo realizado por la propia hermandad, los colectivos vecinales, los caballistas y el Ayuntamiento». Y abundó que esta falta de permisividad «tiene que ser algo único en España».

La edil de Festejos, Pilar Martínez, explicó que «como es habitual cada año, se ha comunicado a Medio Ambiente este evento, que lleva celebrándose durante casi un siglo, y este año se ha vuelto a solicitar permiso en los mismos términos que el pasado, en el que fue todo autorizado sin problema».

Martínez admitió que «en esta ocasión hemos recibido esta sorpresa, que afecta directamente a la celebración de los actos previstos».

La edil lamentó este cambio de criterio «de última hora», pero subrayó que «ante un mandato de este tipo tan solo nos queda obedecerlo para evitar las posibles sanciones, tanto nosotros como administración local como a los propios colectivos». La romería arrancará hoy, a las 7.30 horas, desde la iglesia Mayor de Santiago. Lo hará en un silencio sepulcral para no sacar de su tranquilidad natural al búho real y al halcón peregrino.