Borrar
Gabriel García Mármol, sobrino y manager durante 27 años del desaparecido Manolo Escobar.
«Su familia siempre fue su 'carro' más importante»

«Su familia siempre fue su 'carro' más importante»

María Eugenia Alonso

Domingo, 5 de octubre 2014, 07:36

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Manolo Escobar ha escrito la historia de una generación. Canciones como Mi carro, La minifalda o Y viva España fueron números uno en ventas en los años sesenta, convirtiéndole en un ídolo de multitudes. Un gran artista pero sobre todo, un hombre bueno. Así lo define su sobrino y manager durante 27 años, Gabriel García Mármol, quien acaba de sacar Conversaciones con un hombre bueno (Ed. Planeta).

Se trata de un libro íntimo sobre las vivencias de tío y sobrino en el que, a poco menos de un mes de cumplirse el primer aniversario de la muerte del almeriense, se descubre al Manolo más desconocido, aquel que era marido, padre, hermano, amigo... y que dejaba al artista sobre el escenario.

- Una de las canciones más conocidas de su tío fue Mi Carro ¿Fue el carro de su familia?

No lo sé. Si consideramos que Manolo era el carro de la familia, digamos que como en todos los carros había gente que tiraba y gente que se subía y no tiraba. Lo que sí es seguro es que para Manolo siempre fue su carro más importante.

- ¿Cómo era Manolo Escobar en la intimidad?

No se diferenciaba mucho del Manolo que la gente conocía. Era un tío claro, diáfano. No escondía prácticamente nada. Si que es verdad que luego tenía sus temas personales que no se veían en un escenario. Pero no era de esos artistas que tú cuando los tratas fuera del escenario tienen una personalidad distinta, un talante diferente No, Manolo siempre decía que él tenía mucha suerte de no cambiar porque no había tenido que estar fingiendo tanto tiempo y le había ido bien. Era un hombre bueno, una persona bondadosa, que no le gustaban las complicaciones, que evitaba los conflictos.

- Querido por su familia, por el público y también por sus compañeros de profesión

Sí como comento en el libro prácticamente no hubo ninguna voz discordante cuando Manolo falleció. Seguro, segurísimo que habría gente que no le apreciaba porque todos tenemos a alguien así pero optaron por callarse. Es verdad que Manolo nunca se metió con nadie. No recuerdo yo quitas, ni problemas con ningún compañero ni ningún colega. Yo creo que Manolo no quería los problemas. Uno de los defectos que tenía para mí es que era muy pusilánime del conflicto y los evitaba siempre. Entonces quizás sus compañeros de profesión al no tener nunca conflicto con él no ha habido rencores.

- ¿Cómo fue trabajar con él?

Fue muy gratificante. Yo si pusiera la balanza de mis experiencias con él estaría muy inclinada hacia lo positivo. Era una persona muy fácil de llevar, con sus manías como todo el mundo. Pero yo siempre lo digo mi suerte y mi desgracia es que yo empecé en este oficio con Manolo Escobar y entonces claro mi suerte es que lo he disfrutado mucho y mi desgracia es que casi no puedo soportar a ningún artista.

Cuando yo empecé con él era ya un artista y era un tío tan normal que ahora cuando veo a gente que no tiene ese status y que está tan preocupada por tonterías y te hacen la vida difícil por chorradas a mí me es muy difícil trabajar con ellos.

- ¿Cómo fueron los últimos años de Manolo cuando ya estaba enfermo? ¿Fue muy duro tener que bajarse de los escenarios?

No se llegó a bajar nunca de los escenarios pero sí vivió el deterioro físico de la enfermedad. A Manolo le diagnostican el cáncer y durante dos años y medio hasta su fallecimiento está todo el tiempo compagino quimioterapia con escenario. Es verdad que tuvo que bajar la intensidad de su trabajo y acomodarla a su tratamiento pero él sigue trabajando igual. A Manolo lo operan un 28 de mayo y reaparece el 11 de julio cantando con la Selección cuando ganó el Mundial. Prácticamente había pasado la cuarentena como quien dice y ya ese verano hicimos gira.

- ¿Pensó alguna vez en retirarse?

Manolo siempre dijo que él aunque no llenara un teatro seguiría actuando, que él se retiraría cuando la voz no le permitiera actuar. O sea lo que él nunca iba a dejar es arrastrarse, es más, a su círculo más cercano siempre nos decía: ¡No me dejéis! Porque he visto a grandes artistas que no se han dado cuenta de que ya no podían cantar y me ha dado mucha pena. Si yo hubiera visto que la voz no podía, lo hubiese aconsejado que no cantase. Pero la voz le aguantó hasta el final.

- Así que de playback nada

Manolo opinaba que es algo que beneficia a los malos artistas. Él decía igual que el photoshop ha beneficiado a los malos fotógrafos porque los buenos no lo necesitaban, el playback ha beneficiado a los malos cantantes porque los buenos no lo necesitamos. Aún así muchas veces en televisión estuvo obligado a hacer playback porque ya no hay técnicos prácticamente que hagan directos. Pero fuera de eso él nunca quiso hacer playback.

- ¿Alguna anécdota que recuerde con cariño?

En enero del último año actuamos en la sala Mozart de Zaragoza y al día siguiente nos habíamos comprometido, algo que solía hacer muy habitualmente, con una residencia de ancianos en la misma ciudad para ir a cantar. Como acabó muy cansado, le propuse dejarlo pero me dijo que no, que él iba. Cuando llegó a ese salón lleno de ancianos que ponían esa mirada como cuando los niños pequeños ven la cabalgata de Reyes. Inolvidable la estampa. Ver el esfuerzo que hizo y a la gente disfrutando con sus canciones.

- No todo son buenos momentos, en el libro también habla de la ruina económica de su tío

Tuvo un momento en el que se tambaleó. Manolo empieza su carrera en el 61, los 60 y 70 son las grandes décadas de Manolo Escobar. De los veinte grandes éxitos de Manolo, quince son de esos años. En el año 80 un amigo le estafa y se lo quitan absolutamente todo: las casas, los coches, los ahorros, las inversiones. Y toca empezar de cero y ahí tuvo la suerte de que su mujer Anita tiró en ese momento del carro para que él siguiera adelante. Siguió con éxito, volvió a ganar dinero, volvió a vivir y todo lo que Manolo tiene en el momento de su fallecimiento viene del año 81 hasta aquí. Y eso contando que estuvo pagando deudas hasta el año 98. Fue un tema duradero en el tiempo.

- ¿Qué significó Anita en la vida de Manolo Escobar?

Ha sido la persona a la que él más ha querido y mira que ha querido a su madre, a su hija Vanesa y a su nieta. Pero estoy seguro que si hubiese tenido que elegir a alguien esa hubiese sido Anita. Entre ellos había mucha complicidad. Anita ha sido una persona que no ha dado problemas en el trabajo y eso es una suerte. Creo, además, que ha sido la persona más influyente en la carrera de Manolo Escobar. Ella ha determinado que Manolo haya estado tanto tiempo en el candelero, ha dado esa fuerza exterior para ello. No es su media naranja porque eran dos naranjas distintas pero quizá la naranja que ha hecho que el zumo esté todo el tiempo.

- Te despides en el libro con una carta a tu tío en la que das una primicia

Sí vamos a hacerle nuestro pequeño homenaje. Es una comedia musical depequeño formato- ¡qué nadie se espere que esto vaya a ser como Broadway!- protagonizada por su hija Vanesa donde de alguna manera vamos a homenajear a la persona no al artista. Va a ser una obra sobre Manolo pero sin contar su vida. Eso sí, no va a faltar el humor. Para que os hagáis una idea se va a llamar Mi carro lo tienes tú

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios