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El alcalde, receta en mano, llevando el medicamento a un cliente.
¿Excelentísimo mancebo?

¿Excelentísimo mancebo?

Un vecino graba al alcalde de Abanilla cubriendo una guardia en una farmacia a pesar de estar liberado y de que la ley prohíbe ejercer otros trabajos

Jorge García Badía

Domingo, 28 de mayo 2017, 01:04

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Al alcalde de Abanilla, Ezequiel Alonso, le han pillado como se suele decir 'con el carrito del helado'. El Partido Popular le preguntó al socialista en el Pleno de marzo si «¿es cierto que usted cubre guardias nocturnas en la farmacia que hay junto a la iglesia?», y la respuesta no se ha conocido hasta pasados dos meses, en la sesión de mayo, en la que el primer teniente, José Antonio Rocamora, respondió en nombre del regidor: «No es cierto, en todo caso acompaño a mi hija en alguna ocasión hasta su lugar de trabajo, sobre todo cuando tiene que atender a altas horas de la noche».

Sin embargo, un vecino que acudió a la farmacia próxima a la iglesia de San José, tuvo la sangre fría de grabar 'de extranjis' al alcalde socialista en una guardia nocturna. La grabación, que obra en poder de 'La Verdad', se produjo en marzo, justo cuando el PP le interpeló por ello. En el vídeo se aprecia con claridad a Ezequiel Alonso despachando supuestamente a un cliente. El regidor, mientras sujeta con una mano la receta, le explica que «no existe la gentamicina en pomada». Incluso le aclara al vecino que «se ha equivocado, lo retiraron del mercado».

El asunto no tendría mayor trascendencia que una supuesta mentira al Pleno. Pero el problema es que Ezequiel Alonso tiene una dedicación exclusiva, por la que cobra un salario bruto anual de 36.124 euros, y la ley del Régimen de Dedicaciones Exclusivas y Parciales dispone que la percepción de un sueldo «será incompatible con la de otras retribuciones (...), así como para el desarrollo de otras actividades».

Además, la ley de Incompatibilidades del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas expone que «el ejercicio de actividades profesionales, laborales, mercantiles o industriales fuera de las Administraciones requerirá el previo reconocimiento de compatibilidad». Tal extremo no se ha tramitado.

El regidor justificó en su momento ser el primer alcalde en la historia de Abanilla que se ponía un sueldo diciendo que dejaba su profesión de taxista para dedicarse al cien por cien al Ayuntamiento. Pero no dijo nada de las guardias que cubría en la citada botica desde hace años. Durante toda la legislatura algunos vecinos han denunciado insistentemente que seguía desempeñando supuestamente su labor de personal auxiliar.

El portavoz del PP, José Antonio Blasco, afirmó ayer que «llevamos dos años diciéndole que está cometiendo una irregularidad y seguía adelante. El quiere el cien por cien del Ayuntamiento y no perder las prebendas de fuera». Blasco avanzó que pedirá asesoramiento jurídico a los servicios de su partido «para ver si esto es constitutivo de delito».

El portavoz dudó de la formación del alcalde para estar en una farmacia. «Tendrá que justificar esto, no sé si tiene algún título para expedir medicamentos». La edil del IUMA, María Dolores Saurín, enfatizó que «era una cosa que sabía medio pueblo» y recordó que «durante la vigencia de una liberación no se pueden desarrollar otras actividades laborales, pero es que ni gratis se debe hacer». La edil concluyó que «el tiempo vuelve a dar la razón al partido independiente; en pro de la transperencia le recordamos al alcalde que es el primero que debe dar ejemplo».

Este diario telefoneó varias veces al alcalde y le informó del contenido del vídeo a través de un SMS para recabar su versión y preguntarle, entre otras cosas, si solo cubrió puntualmente la guardia de marzo o si está contratado en la farmacia. Pero el regidor no respondió a ninguna de las llamadas.

«No está contratado»

El dueño de la farmacia, José Ibáñez, se puso en contacto con este diario para defender al alcalde. «No está contratado, antes de las elecciones sí que lo estaba, pero ahora es su hija la que está empleada». Preguntado por el motivo por el que Ezequiel Alonso, sin estar ya contratado, aparecía en el vídeo dispensando medicamentos y moviéndose con libertad por el almacén, el boticario afirmó que «el que entrará allí es porque es mi amigo».

Ibáñez, por activa y por pasiva, reiteró que «todo es legal» y que si el primer edil ha sido visto en las guardias de la farmacia en varias ocasiones por los vecinos, «es porque su hija es joven y la acompaña por la noche». El farmacéutico zanjó la conversación recordando a los partidos de la oposición que «eso lo puede hacer un padre por su hija».

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