Secciones
Servicios
Destacamos
Murcia
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Viernes, 22 de septiembre 2017, 09:18
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Afean la vía pública y el centro de la ciudad y generan interferencias visuales con la consiguiente distracción a los conductores cuando van al volante. La Concejalía de Calidad Urbana, que dirige José Guillén, lleva algo más de un mes realizando batidas para retirar postes, vallas y rótulos luminosos que carecen de licencia municipal. «Hay una normativa -indica el edil- que establece quién puede y cómo se debe realizar la publicidad y hay empresas que hasta han colocado sus rótulos en zonas BIC, como el Puente Viejo, sin permiso». Guillén asegura que con esta actuación no se persigue un afán recaudatorio por parte del Ayuntamiento sino «mejorar la calidad urbana de nuestra ciudad y pedanías».
La Junta de Gobierno acordó el pasado 26 de mayo iniciar el procedimiento de retirada de todas las instalaciones con publicidad sin autorización municipal que se encontrasen en la vía pública.
180 postes han sido retirados de la vía pública. Algunos, incluso, de nombres de calles y avenidas
35 carteles han sido desmantelados por los servicios de Calidad Urbana desde el 4 de agosto
23 vallas publicitarias no tenían autorización municipal
25 rótulos luminosos o de gran tamaño, sin licencia, restaban visibilidad o dificultaban la accesibilidad
Después de varios meses de advertencia a los propietarios, varios equipos dirigidos por técnicos del Ayuntamiento y en colaboración con las empresas que tienen la contrata de la explotación de la publicidad callejera -JC Decaux, MuyBici, Servicios de Publicidad Exterior Alegría y Actividad Pública- comenzaron a principios de agosto las batidas para retirar las señales ilegales. Previamente se había informado a los propietarios y, en los casos en que no fue posible su localización, se realizó la comunicación a través de una notificación que fue publicada en el Boletín Oficial del Estado el pasado 2 de agosto. En el mismo se daba cuenta de las alegaciones presentadas por algunas mercantiles y que habían sido desestimadas.
Desde el 4 de agosto han sido retirados 180 postes, 35 carteles, 23 vallas publicitarias y 25 rótulos luminosos o de gran formato. Las actuaciones se han llevado a cabo en el centro de la ciudad -Gran Vía- como en grandes avenidas -Juan Carlos I, Juan de Borbón, Ronda Sur. También se ha actuado en muchas pedanías, como Beniaján, Torreagüera, Los Ramos, Los Dolores, San José de la Vega y La Alberca, entre otras. El operativo continúa, ya que quedan señales sin retirar y, además, siguen apareciendo otras nuevas sin la pertinente autorización municipal.
El 'modus operandi' de los operarios municipales comienza por fotografíar la señal o poste que se va a retirar de la vía pública. Además, se rellena una ficha con los datos de qué tipo de señal se trata, el nombre de la calle y la ubicación, ya sea en la ciudad o en pedanías. De este modo, cuando acuden las brigadas de la contrata In Situ a retirar conocen la ubicación exacta. Luego en camionetas son trasladadas hasta un depósito municipal.
Según los artículos 98 y 102 de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, «al existir incumplimiento voluntario de la orden de retirada por parte del responsable, la Administración puede proceder, previo apercibimiento ya realizado, a la ejecución subsidiaria. El coste de la retirada podrá ser exigido a los particulares responsables mediante el procedimiento legal correspondiente».
Según la ley, la instalación de publicidad exterior requiere de autorización municipal y ha de ser compatible con el interés público general. El Ayuntamiento estima en torno a 1.000 euros el coste de la retirada de cada poste, importe que se exige a los propietarios de forma subsidiaria.
Pizarras con el menú del día
Otra de las modas que ha proliferado en los últimos tiempos en el sector de la hostelería es la colocación de pizarras en las aceras o calles peatonales anunciando el precio del desayuno o del menú del día. A esta práctica también se le ha puesto coto desde la Concejalía de Calidad Urbana, según indica su titular, José Guillén. «Los locales deben cumplir unas normas en la vía pública por cuestiones no solo de estética, sino también de accesibilidad», señala. También con esta finalidad se han hecho dos y hasta tres batidas. En general, después de apercibir a los dueños de los establecimientos, suelen retirar las pizarras. «En los casos en que ha habido reticencia, se les ha comunicado por escrito y se les ha abierto expediente».
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La hora que separó a una madre y su hijo de morir juntos en Palencia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.