Un nuevo hogar para los 'riders'

Un espacio en el que tiempo ha pasado factura, ya que presenta «transiciones picadas y brutas, las rampas tienen agujeros y en mal estado, y las curvaturas de algunas de las rampas no son correctas», explica Asier Uriarte, gerente de la tienda Coalition Skateshop, un local especializado en 'skates', 'scooters' y patines, y representante del equipo de 'riders' de su tienda. Por esta razón, otro espacio en la ciudad será reservado a los amantes de los deportes extremos: el Urban Park.

El lugar elegido para desarrollar el proyecto, que va a poner en marcha el Ayuntamiento, es la cubierta del parking del Cuartel de Artillería, donde se acondicionará una serie de instalaciones que se adecuen a diversas disciplinas. Alo largo de unos 10.000 metros cuadrados, los colectivos que practiquen 'skate'(monopatín), 'scooter' (patinete), BMX'S(bicicleta), 'rollers' (patines en línea), danza urbana y escalada podrán citarse detrás del antiguo complejo militar de Murcia. «Es un proyecto muy interesante porque es inclusivo, tiene en cuenta todas las modalidades», comenta Asier.

Pero no es fácil crear la identidad de este complejo. Por ello, durante la concepción del proyecto se están realizando uniones en las que participan los técnicos de Urbamusa, empresa que gestiona el aparcamiento del Cuartel de Artillería, y los representantes de los grupos urbanos. Un método de trabajo «participativo», explica el concejal de Modernización de la Administración y Desarrollo Urbano, José Guillén. «Queremos que los colectivos aporten sus ideas, que nos ayuden en la planificación del proyecto».

Una atractiva propuesta paisajística que comenzó a forjarse el pasado 5 de julio en una reunión, en la que participaron más de 50 representantes de los diferentes colectivos, con el objetivo de recuperar y consolidar la imagen del Río Segura como un espacio de identidad propia. El pavimento del Urban Park, que actualmente se encuentra en fase de revisión, «dibuja trenzados, de trazos reconocibles en la noche, en el que se irán desarrollando las actividades en volúmenes de carácter escultórico», explica el delegado.

Asimismo, el Urban Park contará con zonas adaptadas a los 'riders', con un rocódromo y con un espacio destinado a la práctica del 'parkour'. En la primera reunión, los colectivos de danza urbana reivindicaron la creación de un espacio para el baile y para la expresión artística, así como la posibilidad de aumentar las zonas establecidas para el 'parkour' y la necesidad de tener en cuenta al colectivo de patinaje de velocidad, con su respectivo espacio diseñado para su desarrollo.

En este participativo método de trabajo, algunos de los elementos que crearon cierto debate fueron, para los representantes del ámbito del 'skater', las diferentes estructuras con forma de caja envolvente. Instalaciones que podrían ser incompatibles con algunos movimientos. Por otra parte, los grupos de escalada propusieron aprovechar el rocódromo para «ampliar y desarrollar nuevas figuras geométricas, dándole otra dimensión al espacio y dotándolo de mayor identidad», comentaron los representantes.

Durante el encuentro, se recordó la importancia de crear espacios de descanso y de integrar sombras en el complejo. Para completar el Urban Park, a lo largo de las próximas semanas se realizarán varias reuniones con los colectivos para comentar y afianzar los elementos establecidos, y para detallar y adecuar el diseño del Urban Park. Un espacio «necesario en esta ciudad», apunta Asier Uriarte, uno de los representantes que participó en la primera sesión como nexo entre el Ayuntamiento y las asociaciones de 'riders'. «Dada nuestra experiencia en los deportes extremos, podemos corregir los errores que pudieran haberse hecho en el diseño y mejorar su funcionalidad», apunta.

No solo los entrenamientos y las jornadas de ocio serán bienvenidas en el Urban Park. En un futuro, los representantes que han aportado su granito de arena al proyecto esperan poder organizar ligas comarcales y competiciones nacionales. Por esta razón, en el primer encuentro propusieron dotar al complejo de gradas y de zonas adecuadas a los posibles espectadores.

Asimismo, se prevé la realización de clases y talleres en el nuevo complejo «para todas las edades», explica Asier Uriarte con una sonrisa, mientras se imagina rodeado de sus alumnos en un futuro. «Cualquier persona puede aprender a patinar», comenta. Un hecho que conoce de primera mano. «Una vez trabajé con una pareja de ochenta años que quería patinar, y aprendieron».

De momento, este joven de 31 años, que comenzó en el mundo del 'skate' de la mano de su tío, cita a quienes quieran pasar una «divertida» jornada de aprendizaje en el SkatePark El Barnés, donde da clases de 'scooter' gratuitas, cada sábado a las 12.00 horas.