La Comunidad no declara BIC la Cárcel y cree suficiente que sea bien de relevancia cultural

El concejal de Fomento, Roque Ortiz, aprovechó ayer la situación para denunciar que «Ahora Murcia solo se ha dedicado a colocar obstáculos e impedimentos» desde que se planteó la recuperación de la Cárcel Vieja. Además, el teniente de alcalde recordó que Ahora Murcia votó en contra del expediente de financiación de este proyecto, «que pudo salir adelante porque su presentación en el Pleno es de dos o tres ediles (dependiendo de su pérdida de un concejal), insuficiente para paralizar su aprobación». En opinión de Ortiz, lo único que realmente pretendía Ahora Murcia era «paralizar, entorpecer e incluso imposibilitar que Murcia pueda recuperar un espacio singular que se encuentra muchos años abandonado porque su política es esa: no, no y no».

Desde Ahora Murcia lamentan que el alcalde de Murcia, José Ballesta, y su concejal Roque Ortiz se alegren de que la antigua prisión no sea declarada Monumento Nacional «con la excusa de que con la mínima protección de la que goza desde hace décadas es suficiente». Además, según ha asegurado la concejal Ángeles Moreno Micol, «olvidan que con esa misma protección el edificio casi se ha venido abajo».

La concejal de Ahora Murcia también manifiesta que «la alegría del Partido Popular por que un edificio murciano no sea declarado Monumento Histórico Español refleja su estrechez de miras y su miopía política y cultural» y asegura que el motivo por el que el gobierno del PP hace esto con su ciudad es «porque no quieren a Murcia».

La citada resolución de Bienes Culturales, según los criterios técnicos de Patrimonio Histórico, rechaza la solicitud de Ahora Murcia porque considera que el inmueble abierto en 1929 y cerrado en los 80 se encuentra suficientemente valorado con su categoría actual: la de bien catalogado por su relevancia cultural.

En esta clasificación se encuentran los bienes muebles, inmuebles e inmateriales que posean una notable relevancia cultural y que no merezcan la protección derivada de su declaración como bienes de interés cultural, según informó el concejal Ortiz. Asimismo, esta resolución prevé la obligación del titular de los bienes en cuestión de «conservarlos, custodiarlos y protegerlos para asegurar su integridad y evitar su destrucción o deterioro».