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El portavoz de la Plataforma, Francisco Ruipérez, ayer, entre Esther Herguedas y Pedro López, acompañado por representantes de sindicatos y asociaciones.
Doce poblaciones siguen sin bus los fines de semana a los dos años de los ajustes

Doce poblaciones siguen sin bus los fines de semana a los dos años de los ajustes

La Plataforma del Transporte Público califica de «nefasta» la reorganización y exige la reposición de las líneas suprimidas

Manuel Madrid

Jueves, 2 de octubre 2014, 01:44

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La Plataforma Ciudadanos por el Transporte Público sacó ayer a relucir, coincidiendo con el segundo aniversario de la puesta en marcha del Plan de Optimización de la concesión de autobuses interurbanos (pedanías), dependiente de la Comunidad Autónoma, que hay al menos doce núcleos urbanos del municipio que siguen sin cobertura los fines de semana y festivos. Es decir, doce poblaciones -El Bojar (Beniaján), Cabezo de la Plata (Cañadas de San Pedro), Casillas, Los Dolores, Ermita del Rosario, Orilla del Azarbe, Rincón de Seca, Sangonera la Seca, Santiago y Zaraíche, El Secano (El Raal), Zarandona y Zeneta- que solo tienen servicio de autobús de lunes a viernes. Otras nueve pedanías sí tienen autobús los sábados, pero con una frecuencia de paso de 120 minutos (La Albatalía, La Arboleja, Javalí Nuevo, Javalí Viejo, La Ñora, Puebla de Soto, La Raya, Rincón de Beniscornia y Sangonera la Seca); mientras que en otras seis (La Alberca, Alquerías, Era Alta, Patiño, San Ginés y Santo Ángel) pasa un bus cada hora. Para más inri, en 23 pedanías no hay ni un solo servicio los días festivos.

Este panorama es inadmisible para Francisco Ruipérez, portavoz de la entidad, que hace un balance «nefasto» de estos dos años de «graves recortes» en las líneas de transporte público de las pedanías. «El Plan de Optimización rebajó unos servicios que de por sí estaban bajo mínimos, y la situación, si entonces era mala, ahora es peor todavía», criticó ayer, en una rueda de prensa en el edificio Moneo, acompañado por los concejales Pedro López (PSOE), Esther Herguedas (IU-Verdes), representantes de UGT, Consumur y Murcia en Bici.

La Plataforma exige a la Comunidad Autónoma la restitución de los servicios suspendidos el 1 de octubre de 2012, empezando por atender las demandas vecinales en Ermita del Rosario (Los Garres) y Aljucer. Curiosamente en estos dos puntos ya se han iniciado actuaciones, pero son insuficientes para la Plataforma. En Ermita del Rosario se ha ampliado el horario hasta las 15.30 horas, pero siguen sin autobús las tardes y los fines de semana. Y en Aljucer la Comunidad y Latbus prestan desde febrero un servicio especial con el Rayo 18, que une La Glorieta y El Palmar.

La Comunidad suprimió en 2012 10 líneas (7, 12, 25, 27, 34, 38, 43, 46, 54 y 61) argumentando una baja ocupación y reordenó frecuencias en el resto. Ruipérez señaló que hay «miles de usuarios» afectados por esos recortes, que han tenido que buscarse la vida, recurrir al transporte privado, o incluso renunciar a empleos porque lo que ganan no compensa con los gastos que les supone desplazarse en autobús. Lamentó que, por ejemplo, las pedanías de la costera sur (Beniaján, San José de la Vega, Los Garres, Algezares, Santo Ángel y La Alberca) tengan servicios mínimos con el hospital de La Arrixaca, en El Palmar, y «lo más sangrante» es que en ciertos horarios tengan que desplazarse a Murcia para coger allí otro autobús que les lleve hasta la Ciudad Sanitaria. Esto supone también un desembolso mayor para los usuarios, hasta el punto de que la secretaria de la asociación Ermita del Rosario, Mercedes Romero, afirmó que fue con su hija a una revisión a La Arrixaca y el viaje de ida y vuelta desde su casa al hospital les salió por 12 euros: «Parece mentira, pero no. Es así».

«El precio del bus espanta»

El precio del bus interurbano, según los miembros de UGT en Latbus, no ayuda a captar clientes. Al contrario, los espanta. «Hay gente que le gustaría tener un bono más barato, como los 'coloraos', con recargas a partir de 5 euros. Recomendamos el bono, pero les sigue pareciendo caro».

Desde el PSOE, Pedro López señala que la reorganización del transporte de 2012 «sirvió para ampliar distancias y alejar a las personas; es imprescindible rehacer lo que había, estudiando las necesidades y desde la participación ciudadana». La edil Esther Herguedas (IU) lamentó que Comunidad y Ayuntamiento no hayan pensado en un derecho básico como la movilidad y accesibilidad de las personas, «privando a parte de la población de sus derechos», por lo que reivindicó «el máximo consenso a la hora de restablecer y mejorar servicios y permitir la participación vecinal en la toma de las decisiones».

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