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A la derecha de la imagen, andamio que achica la calle Honda. Antonio Gil / AGM
Veinte 'puntos negros' para los desfiles

Veinte 'puntos negros' para los desfiles

El paso de las cofradías se ve empañado por la presencia de edificios en mal estado en el casco histórico. Las brigadas municipales ya han comprobado que ninguna estructura de sustentación o valla de los solares pondrá en peligro las procesiones

Eduardo Ribelles

Cartagena

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Martes, 20 de marzo 2018, 01:30

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El desmantelamiento del gran andamio montado para restaurar la fachada del edificio cuyo bajo está ocupado por Zara, en la Calle Mayor, y el saneamiento exprés de los balcones del número 3 de la Puerta de Murcia demuestran el empeño del Ayuntamiento por despejar de obstáculos el recorrido de las procesiones. Es lo que viene ocurriendo tradicionalmente para intentar que la ciudad ofrezca su mejor cara durante los diez días que duran sus fiestas principales. Esta semana tiene previsto completar esa labor con la eliminación del armazón metálico que lleva meses montado para recuperar el frontal del 17 de la calle Honda. Sin embargo, hay veinte 'puntos negros' en los recorridos que comenzarán en la madrugada del Viernes de Dolores y acabarán con la entrada de la Virgen del Amor Hermoso, el Domingo de Resurrección, que ni las brigadas de Vía Pública ni los particulares pueden solucionar a tiempo.

Hoy entran en vigor las restricciones en el tráfico de coches por el casco histórico. Tal y como figura en el bando de la alcaldía, a partir de las nueve de la mañana comienza la prohibición de aparcar y circular por las calles Aire, Cañón, Plaza San Sebastián, Puerta de Murcia, Carmen, Santa Florentina, Parque, Plaza de López Pinto, Serreta, Caridad, Duque, Plaza de San Ginés, San Francisco, Campos y Jara. Las limitaciones se ampliarán a otras calles implicadas en los desfiles el Sábado Santo, el Martes, el Miércoles y el Viernes Santo y el Domingo de Resurrección. El objetivo es despejar de vehículos a motor las calles.

  • Aire (Cañón a Cuatro Santos) Tres inmuebles desocupados desde que el bajo dejó de tener uso como bar amenazan ruina.

  • Aire (números 6 a 14) Inmuebles desocupados con andamios y carteles de promotoras.

  • Cuatro Santos Más de la mitad de las parcelas son solares, edificios desocupados y en ruina o fachadas deterioradas y aseguradas precariamente con andamios. No pasan las procesiones pero es atajo de los espectadores.

  • Solares Morería Baja Vallas vencidas y deficientemente aseguradas. Tampoco pasan las procesiones pero es atajo peatonal.

  • Serreta (esquina a Plaza del Sevillano) Inmueble abandonado y cubierto por una red, con andamios.

  • Serreta (esquina calle Pozo) Inmueble que conserva la fachada pero demolido en la parte interior. Un armazón lo sustenta.

  • Calle Carmen, 5 Inmueble junto a un solar, con una red y una valla que lo recubren.

  • Calle Santa Florentina, 4 Inmueble en restauración con un andamio que limitará la colocación de público de las procesiones.

  • Pasaje Conesa Vallas móviles de obra que aseguran una plancha metálica al suelo sobre una zanja.

  • Honda, 17 y 19 En el primer edificio, obra de restauración; en el segundo fachada asegurada con un andamio ante un solar que fue demolido.

  • Plaza de San Francisco Vallas que delimitan una zona en riesgo de dejar caer cascotes, en el número 7 de la Glorieta. El edificio ha sido comprado y en él se prevé la construcción de un hotel.

  • Calle San Francisco, 20 y 22 Soplar con el cableado en precario y fachada asegurada con un andamio interior.

  • Calle del Duque, 4 Solar vallado con cables sostenidos precariamente por varas metálicas.

  • Solar Duque-Caridad Vallas hundidas y en precario.

  • Solar Plaza de Risueño Vallas en precario.

  • San Diego, 29 Marquesina con desperfectos.

  • San Diego, 28 Andamio, con red y marquesina para parar cascotes. En la fachada crecen matojos.

  • Mayor, 21 y 23 La casa LLagostera y el Edificio Selecciones llevan siete años con andamios y la fachada tapada. El interior ha sido demolido.

  • Mayor, 8 Fachada tapada y asegurada desde dentro del solar. El inmueble fue derribado por dentro.

  • Lago Frente a la esquina del edificio Puerto Rico, edificio histórico con fachada ruinosa.

El concejal de Vía Pública, Francisco Aznar, garantiza la eliminación de las estructuras que podrían suponer un problema para el paso de los desfiles. «La de la calle Mayor ya ha sido desmontada y la de la calle Honda tiene que ser desmantelada por la empresa constructora. Así se le ha comunicado. Si no puede hacerlo, por alguna circunstancia, se tomarán las medidas necesarias para que no entorpezca el paso de la procesión», advirtió. Ante este edificio pasará el Cristo del Socorro en la primera procesión, así como la Verónica y la Condena en la madrugada del Encuentro. Lo que Aznar no podrá evitar es el efecto visual que los inmuebles destartalados y los asegurados por estructuras metálicas causará al paso de las cofradías.

El Ayuntamiento asegura que el andamio de la calle Honda será retirado antes del Viernes de Dolores

El efecto visual

En el recorrido abundan los andamios, las redes de seguridad, los vallados desprendidos o desplazados y los balcones y las cornisas desconchados. Forman parte de un casco histórico que los sucesivos planes de fachadas solo han conseguido rehabilitar en una mínima parte. Entre los armazones metálicos que restan espacio al público destaca el de la Calle Santa Florentina, en plena restauración. Por allí pasan, por poner solo dos ejemplos, el desfile de la Ofrenda a la Virgen de la Caridad, el próximo viernes por la tarde, y la procesión del Resucitado, el último día de Semana Santa. Su presencia obligará a concentrar el público y el tráfico de viandantes en el otro lado de la calle, aunque no afecta para el paso de las procesiones al tratarse de una calle lo suficientemente ancha.

Inmuebles abandonados o descuidados y parcelas con vallados precarios completan el panorama

En la calle Canales, por donde pasa el Resucitado también, el inmueble que hay junto a la panadería, cubierto por una lona llena excrementos de aves, ha sido recientemente saneado. Otro caso que desmerece lo que algunos procesionistas llaman el «marco incomparable» es el de los edificios comprendidos entre los números 6 y 14 de la calle del Aire. Vacíos por dentro, las viajes estructuras metálicas y de madera que sustentan las fachadas dan un aspecto fantasmagórico impropio de una ciudad cuyo centro histórico está declarado conjunto histórico desde 1980.

Por no hablar de los cables del tendido eléctrico y telefónico que surcan las parcelas de las calles San Diego y Cuatro Santos, sostenidos precariamente por unos postes metálicos. La labor de los bomberos evita problemas mayores con las fachadas antiguas de las que periódicamente se desprenden cascotes. Pasó con la iglesia de Santo Domingo, que fue saneada, y con inmuebles privados diseminados por todo el centro. En cualquier caso, técnicos municipales y los bomberos ya han comprobado la seguridad de todas las fachadas incluidas en los recorridos. Entre ellas también está la de la iglesia de Santa María de Gracia, centro neurálgico de la Semana Santa y una de las que peor está. Su frontal acusa el descascarillamiento del revestimiento y el lateral de la calle San Miguel está peor. El Obispado no tiene planes de arreglo inminente.

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