Los vecinos solo tendrán un mes para pedir ayudas de mejora de viviendas

Esta demora se suma a otra carencia del Programa ARRU (Áreas de Regeneración y Rehabilitación Urbana) de este año: que el Gobierno local optó por no presentar ningún proyecto para financiar la modernización de espacios urbanos degradados, como sí hizo en la edición anterior para construir una plaza en el Monte Sacro, junto a Sor Francisca Armendáriz. Esta decisión supone renunciar a dinero para pavimentación, jardinería, infraestructuras, instalaciones, servicios de abastecimiento de agua, saneamiento, suministro energético, alumbrado, recogida, separación y gestión de residuos, telecomunicaciones y utilización del subsuelo.

Casi un mes después de que el entonces alcalde en funciones, Juan Pedro Torralba, el consejero regional de Fomento, Pedro Rivera, y el secretario de Estado de Vivienda, Julio Gómez-Pomar, firmaron en Murcia el convenio para destintar más de casi 872.000 euros a la remodelación de viviendas, el Gobierno regional aún tiene bloqueada una iniciativa para rehabilitar hasta 155 viviendas.

Los particulares podrán beneficiarse como propietarios únicos de edificios de viviendas, o a través de comunidades de propietarios, agrupaciones de comunidades de propietarios, consorcios y entes asociativos de gestión. Los conceptos subvencionables se dividen en dos apartados: ejecución de obras o trabajos de mantenimiento e intervención en edificios y viviendas, instalaciones fijas, equipamiento propio y elementos comunes, a fin de adecuarlos a la normativa vigente; y obras de demolición y edificación de viviendas de nueva construcción.

Entre otras cosas, hay ayudas para mejorar la conservación de las viviendas a nivel general, en aspectos como cimentación, estructura, instalaciones, cubiertas, azoteas y fachadas; de accesibilidad, mediante la instalación de ascensores, mecanismos elevadores, rampas de acceso o similares; y de eficiencia energética, como carpintería, cerramientos y ventanas, calefacción, refrigeración, ventilación, aislamiento térmico y equipos de energía renovable.

Las ayudas alcanzarán como máximo el 35% del coste de las obras, hasta 11.000 euros por vivienda rehabilitada y 30.000 por cada casa nueva que sustituya a otra demolida.