Secciones
Servicios
Destacamos
José Alberto González
Martes, 21 de febrero 2017, 01:31
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Un encapuchado alteró ayer la tranquilidad Los Belones con un robo a mano armada, que acabó sin daños personales pero que causó alarma entre los vecinos de esta localidad del Mar Menor. Un hombre al que busca la Guardia Civil atracó por la mañana, con una escopeta de cañones recortados, la sucursal de Cajamar, en plena calle Mayor, y se llevó unos 8.000 euros.
Testigos del suceso explicaron a 'La Verdad' que el ladrón ocultó su rostro con una braga, una gorra y unas gafas de sol. El ladrón irrumpió hacia las once y media en el local, en el centro del pueblo, al grito de: «¡Que nadie se mueva!». A continuación, exigió que le entregaran todo el dinero que hubiera en la caja. Incluso fue el mismo quien pasó al otro lado del mostrador y cogió los billetes.
Las fuentes consultadas indicaron que el delincuente cargó el arma en el interior de la oficina, pero que no encañonó a ninguno de los presentes puesto que todos siguieron sus órdenes de no moverse y los hechos ocurrieron de forma rápida. El hombre pidió a una clienta que le abriera la puerta, probablemente para no dejar huellas (no llevaba guantes) y huyó. Aunque a escasa distancia había una patrulla de la Policía Local, cuando los agentes llegaron al banco el delincuente ya se había dado a la fuga.
Los primeros indicios apuntan a que el atracador es un español de entre 50 y 60 años, informaron fuentes policiales. Los testigos consultados por este diario señalaron que el acento del asaltante era el de un español nativo. En el momento del robo, en el banco había una docena de personas, siete de ellas clientes.
Clientela y un ingreso elevado
Entre las hipótesis que manejan los agentes de la Guardia Civil, que inspeccionaron la oficina y tomaron declaración al personal de la entidad y a los clientes, es que el autor del robo huyó en un coche, esperado quizás por un cómplice, y tiene una vivienda en esta zona de la costa. También se sospecha que conocía el pueblo, dado que fue a la oficina cuando había bastantes clientes y tras haberse realizado un ingreso de cuantía elevada.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.