Borrar
Vista del edificio situado en el número 17 de la calle Ramón y Cajal de Cartagena, protegido por una malla.
«Hay grietas que dan miedo»

«Hay grietas que dan miedo»

El Ayuntamiento da 48 horas a ocho familias para que desalojen su edificio del Ensanche, por los daños causados presuntamente por una tubería de Hidrogea

J. A. G.

Viernes, 6 de mayo 2016, 01:22

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Yo alquilé este local hace un año y medio y, a los pocos meses, me dijeron que había encontrado un escape de agua en los bajos del edificio y que estaban haciendo pruebas para ver el daño. Al final resultó que estaba dañada la cimentación del edificio, pero han ido pasando los meses y no han hecho obras para solucionarlo. Ahora van a tener que desalojar el bloque, porque en las casas y en la fachada hay grietas que dan miedo y los vecinos están asustados. Me dijeron que yo no tendría que marcharme, porque este local no está afectado. Y espero que sea así».

A las cinco de la tarde, con gesto sereno pero con la intranquilidad propia de la situación, Óscar García atendía ayer a los clientes del bar-cafetería Elio, uno de los dos locales del número 17 de la calle Ramón y Cajal de Cartagena cuyo edificio debe estar desalojado mañana por la amenaza de ruina.

El bloque, que consta de ocho pisos y está situado cerca de la Avenida Reina Victoria, sufre problemas estructurales debido a la rotura de unas conducciones de agua propiedad de la empresa Hidrogea, según los indicios recabados por los técnicos de la Concejalía de Urbanismo e Infraestructuras.

La solución se ha ido demorando por un conflicto entre los residentes y la concesionaria del servicio municipal de aguas, que desvincula la avería del deterioro de la construcción, el Ayuntamiento se vio forzado ayer a actuar por la vía urgente y logró además un acuerdo provisional entre las partes.

A raíz de la alarma generada entre el vecindario por el tamaño de los surcos que cruzan sus casas y el consiguiente miedo a un derrumbe, el Consistorio envió a un técnico a inspeccionar el inmueble. Y, con los datos recabados en la visita, los servicios municipales decretaron la salida obligatoria de los residentes en el plazo máximo de 48 horas. Tres de ellas serán realojadas por la Concejalía de Atención Social.

De forma simultánea, el alcalde y concejal de Urbanismo se reunió en el edificio administrativo de San MIguel con representantes de la comunidad de propietarios y de Hidrogea. En el encuentro, donde participaron también técnicos de la administración local, según fuentes municipales, la mediación del primer edil permitió que un delegado de la empresa firmara un documento por el que ésta se compromete al abono inmediato a los vecinos de 99.000 euros, con los que costear la reparación urgente del bloque.

La empresa paga por ahora

Se trata del coste calculado en un proyecto encargado por los propios afectados y presentado por estos en el Ayuntamiento. Esta documentación forma parte del expediente de responsabilidad patrimonial abierto por la Administración, por petición de los propietarios de la finca.

Según las fuentes consultadas, Hidrogea condicionó el abono del dinero a que se considere como una medida cautelar, a la espera de la tramitación del expediente. Si el Consistorio (o en su caso la Justicia) acaba dándole la razón, los vecinos tendrán que devolverle la cantidad anticipada.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios