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Operarios del Imsel, acondicionando una playa en Mar de Cristal tras unas lluvias en octubre de 2013 .
Castejón revisa la gestión del director del Imsel tras hallar «facturas en los cajones»

Castejón revisa la gestión del director del Imsel tras hallar «facturas en los cajones»

La vicealcaldesa abre una investigación sobre las compras en el litoral y la presunta adjudicación 'a dedo' de los chiringuitos por los gobiernos del PP

José Alberto González

Viernes, 13 de mayo 2016, 13:37

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Una «situación caótica» por la «falta de transparencia y la ineficiencia». Ésta es la situación que la vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, asegura haberse encontrado en el Instituto Municipal de Servicios del Litoral (Imsel), cuya remodelación en profundidad abordará en los próximos meses tras hallar «gran número de facturas en los cajones» y una presunta «arbitrariedad» en la adjudicación de los chiringuitos de playa durante los gobiernos del PP.

La edil socialista, responsable del área de Dinamización Económica y presidenta del Consejo Rector del Imsel, ha abierto una investigación que incluye revisar la gestión del director de este organismo autónomo del Ayuntamiento, Ventura Valero. A raíz de la información que ha recabado en los últimos nueve meses, Castejón ha tomado ya la determinación de abordar una «profunda reestructuración que priorice la eficiencia, la calidad del servicio y la eficiencia en el gasto». Y, dentro de esa transformación, habrá «un nuevo organigrama» basado entre otras cosas en «un replanteamiento de la figura del director, así como de sus competencias».

'La Verdad' intentó, sin éxito, conocer la versión del director del Imsel, que es funcionario municipal.

En medio de las quejas suscitadas entre adjudicatarios de chiringuitos por el retraso en los permisos desde la Semana Santa, así como de candidatos a la espera de ver contestadas sus alegaciones, un portavoz de Castejón aseguró a 'La Verdad' que el actual equipo de gobierno tiene abiertos varios frente en el Imsel que han ralentizado el trabajo.

Entre otras cuestiones, el Ejecutivo formado por PSOE y Movimiento Ciudadano (MC) ha descubierto «gran número de facturas en el cajón», sobre todo por la compra de material y cuyo importe alcanza decenas de miles de euros, según fuentes municipales; maquinaria en mal estado por falta de conservación; problemas medioambientales por el nulo tratamiento de residuos de poda y algas; falta de inventario; poca eficiencia en el gasto y mal clima entre los trabajadores por la deficiente organización de los servicios».

Castejón prepara un nuevo organigrama donde ella tendrá un mayor control sobre la toma de decisión y el funcionamiento del organismo, creado en por la exalcaldesa Pilar Barreiro y que dirigió el exedil del PP Gabriel Ruiz (fue director general de Infraestructuras). La idea es que el reparto de atribuciones sea «más funcional» y que «la toma de decisiones sea más participativa y con un mayor control del gasto por parte de la presidencia del Imsel».

Uno de los objetivos de Castejón es que las licitaciones generen un «ahorro ostensible en la prestación del servicio». En todos los procesos de adjudicación del Imsel, del Área de Estrategia Económica y del resto de organismos autónomos, se eliminará «la arbitrariedad» y se garantizará «la igualdad de oportunidades y la libre concurrencia».

Sin concurso tampoco este año

Entre los retos de la vicealcaldesa y de la concejal de Turismo, Obdulia Gómez, está la adjudicación de los chiringuitos y otras instalaciones de temporada por medio de un concurso público. Este año, explicaron en el Consistorio, se ha «iniciado el proceso» de adaptación a la nueva normativa de contratos públicos en el caso de los permisos para instalar chiringuitos, quioscos, pérgolas, sillas, mesas, hamacas y parques acuáticos.

En la dirección política del Imsel admitieron el retraso en la autorización, entre otras cosas por problemas con las acometidas de saneamiento, como publicó ayer este periódico. No obstante, destacaron que hasta ahora la adjudicación «era totalmente arbitraria y se hacía de manera discrecional por parte del anterior equipo de gobierno».

Según el actual Ejecutivo, «no había posibilidad para ningún ciudadano, ni empresa, de optar a la concesión de este tipo de establecimientos». «Simplemente se abría un plazo de presentación de solicitudes sin ningún tipo de baremación, lo que en la práctica generaba una situación anómala y poco transparente de adjudicación. Y el nuevo equipo de gobierno, al llegar en junio de 2015, se encontró con el verano encima y no pudo revertir la situación».

Con todo, añadieron en el Ayuntamiento, el Imsel ha tramitado 138 solicitudes, de las que 42 son de chiringuitos. De estos últimos 31 están abiertos y once, ubicados sobre todo en La Manga y Cabo de Palos, lo harán en breve.

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