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Farmacia de Cuesta Blanca, junto a la nacional 332.
Vecinos de la zona oeste se movilizan contra el cierre de la farmacia de Cuesta Blanca

Vecinos de la zona oeste se movilizan contra el cierre de la farmacia de Cuesta Blanca

Residentes en seis pueblos se unen para exigir a Sanidad por carta que no apruebe el traslado de la botica a La Vaguada por falta de clientela

Antonio López

Viernes, 22 de mayo 2015, 01:15

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Los vecinos de Cuesta Blanca, Perín, Tallante, Los Puertos de Santa Bárbara de Arriba y de Abajo, San Isidro y La Magdalena se han unido para intentar evitar el inminente cierre de la farmacia ubicada en la calle Mayor del primero de esos pueblos. En una carta remitida por segunda vez en lo que va de año a la Consejería de Sanidad y Política Social, advierten del próximo traslado a La Vaguada de este punto de venta de medicinas, el único que da servicio en toda esa zona desde hace más de 25 años.

Los permisos para cambiar de ubicación la botica los tiene que conceder en primera instancia la Consejería y, en segunda, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Región de Murcia. Los vecinos creen que sería un error el cierre, ya que «de ella dependen muchas personas de esos seis pueblos, la mayoría mayores, que no tienen cómo llegar a la más cercana», explicó el presidente vecinal de Cuesta Blanca, Marcos Pividal.

En el escrito recriminan que Sanidad no haya contestado aún a la primera petición que realizaron, también por correo, el pasado 30 de enero. En ambos documentos muestran su oposición al traslado, ya que la Consejería «tiene competencias para evitar el cambio y así las inquietudes y el profundo perjuicio a un importante número de habitantes de esas poblaciones».

A siete kilómetros

La botica más cercana a la de Cuesta Blanca se encuentra, según los vecinos, a siete kilómetros, en Molinos Marfagones. Esa distancia es «demasiada amplia si se tiene en cuenta que muchos de ellos dependen del transporte público, cuyas frecuencias de paso son muy escasas en la zona», criticó Pividal.

Los residentes saben que si el farmacéutico ha decidido cerrar y logra los permisos necesarios para llevarse del pueblo su negocio nadie podrá evitarlo, pero han solicitado a la Consejería que amplíe el número de licencias de apertura de farmacias, para que abran otra en el pueblo. Una representación de las asociaciones de vecinos se han reunido con el boticario para conocer sus planes. «Nos dijo que está planeando abrir un botiquín, un establecimiento sanitario de atención farmacéutica, dependiente de una oficina de farmacia próxima y surtido a través de la misma».

Un portavoz de la Consejería de Sanidad aclaró a 'La Verdad' que en ese departamento autonómico aún no han tomado una decisión sobre el traslado. Señaló que primero hay que escuchar a los vecinos y, después, habrá que ver en la situación en la que se queda la zona con el cierre. Insistió en que habrá que estudiar la situación.

Este diario intentó ayer en varias ocasiones conocer la versión el responsable del establecimiento, incluso a través del Colegio de Farmacéuticos, pero no hubo respuesta.

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