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La periodista de La Sexta, interpelando a Sánchez.
«¡Murcia a tope!»

«¡Murcia a tope!»

Las grabaciones a los líderes de la 'Púnica' no ofrecen nuevos elementos incriminatorios sobre el supuesto acuerdo de Sánchez, pero las conversaciones crean revuelo nacional. En las cintas se oye reír a un empleado de De Pedro después de que le comunica que ha cerrado acuerdos de reputación con Sánchez y Barreiro

LA VERDAD

Martes, 28 de marzo 2017, 02:09

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«¡Murcia a tope¡», exclama uno de los empleados de Alejandro de Pedro, después de una espontánea carcajada, cuando el jefe le informa por teléfono de que acaba de cerrar los contratos de reputación de la entonces alcaldesa de Cartagena, la hoy senadora Pilar Barreiro, y de quien era consejero de Educación, Pedro Antonio Sánchez, en la actualidad situado al frente del Gobierno regional. El contenido fundamental de esa conversación ya era conocido públicamente porque figuraba en la transcripción de los informes de la Guardia Civil, pero la escucha de esas grabaciones adelantadas por la Cadena SER y elplural.com causaron un revuelo mediático fulgurante que rápidamente se propagó por las redes sociales. No solo corroboraban que existió esa oferta sino que el propio Alejandro de Pedro la daba por cerrada (Pedro Antonio Sánchez siempre ha insistido en que nada se firmó, en línea con lo mantenido posteriormente por el informe encargado por el fiscal general del Estado). El hecho de que las grabaciones trascendieran el día en que expiraba el ultimátum de Ciudadanos a Pedro Antonio Sánchez, y que se llevaba a cabo la vista con los peritos del 'caso Auditorio' en el TSJ, volvió a situar a Murcia en el centro del foco mediático nacional y a que triunfara el 'hashtag' 'Murcia a tope' en las redes sociales.

Estas grabaciones, entre el conseguidor de la trama Alejandro de Pedro y su socio José Antonio Alonso Conesa, con empleados de ambos y técnicos y jefes de gabinete de distintas consejerías en Murcia, ponen de relieve la existencia de tres reuniones en las que participó el entonces consejero de Educación y hoy presidente autonómico, Pedro Antonio Sánchez, entre junio y octubre de 2014.

«'Murcia, a tope' no es un eslogan que sustituye a 'Murcia, Costa Cálida', sino un nuevo episodio del bochorno», dijo el portavoz regional de Ciudadanos, Miguel Sánchez, en referencia a la grabación telefónica en la que dos implicados en la trama aseguran tener apalabrado con Pedro Antonio Sánchez cuando era consejero de Educación un contrato para la mejora de su reputación en internet.

La portavoz del Gobierno murciano, Noelia Arroyo, afirmó que «nada es casual» y «todo forma parte de una estrategia política» al ser preguntada por las conversaciones telefónicas de la 'Púnica'. Aseguró que esas grabaciones de la Guardia Civil «no aportan nada nuevo». Arroyo insistió en que el contenido de los audios ya fue publicado en diversos medios, y en que «lo único que hay que decir es que no se contrató nada, ni se firmó nada». Por su parte, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, denunció que las grabaciones del sumario del 'caso Púnica' son «enormemente graves» y que, por lo tanto, el jefe del Ejecutivo murciano «debería estar fuera de la política».

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