La Arrixaca realiza el primer alargamiento de fémur en Murcia a una niña con acondroplasia

La Unidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil de La Arrixaca, que coordina César Salcedo, ha realizado la primera operación de alargamiento de huesos practicada en la Región a un paciente con acondroplasia, una enfermedad muy poco frecuente que provoca enanismo, entre otras complicaciones, como macrocefalia y problemas motores. A la paciente, una niña de 14 años, se le intervino el viernes en ambos fémures, colocándole sendos clavos -con fijadores externos-, que permitirán ir alargando el hueso a razón de un milímetro diario, hasta ganar un mínimo de ocho centímetros y un máximo de doce.

Las intervenciones de alargamiento de huesos (fémur, tibias, húmeros) y de corrección de deformaciones son habituales en La Arrixaca, donde el equipo de Salcedo se ha convertido en una referencia regional y nacional. Al año se realizan unas 30 operaciones de este tipo. La novedad, en este caso, es que se trata de la primera cirugía de alargamiento óseo en una paciente con acondroplasia. Eso implica que, por primera vez, el alargamiento se realiza en ambos fémures a la vez, con la complejidad técnica que ello conlleva.

La intervención fue dirigida por Salcedo y por Ignacio Ginebreda, jefe de la Unidad de Patología del Crecimiento del Instituto Dexeus de Barcelona, que es el centro al que hasta la fecha se derivaba a los afectados por acondroplasias de la Región para ser operados. «A partir de ahora ya podremos realizar aquí las intervenciones a estos pacientes», subraya Salcedo. La acondroplasia es una enfermedad de las denominadas raras. Aproximadamente, se diagnostican unos dos casos nuevos al año en la Región, explica el coordinador de la Unidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil de La Arrixaca.

La operación de la pasada semana es solo el primer paso de un largo camino para esta niña de 14 años, con quien se volcará un equipo multidisciplinar de profesionales de La Arrixaca: médicos rehabilitadores, fisioterapeutas, enfermeros, genetistas y el servicio de Traumatología, que dirige Manuel Medina. El objetivo es que pueda pasar de su altura actual (1,35) a algo más de 1,50, que es la estatura a partir de la cual una persona puede desenvolverse en la vida cotidiana. «Los mostradores, los baños, todo está diseñado a partir de esa altura», explica César Salcedo. El proceso durará más de un año.

La paciente está en las mejores manos posibles. El Ministerio de Sanidad calificó en 2010 a la Unidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil de La Arrixaca como CSUR (Centro de Referencia del Sistema Nacional de Salud). Eso implica que en el hospital se trata no solo a pacientes murcianos que requieren alargamientos óseos o corrección de deformaciones, sino también a niños de otras comunidades.

En 2015, la unidad realizó 98 intervenciones, lo que representó un incremento del 28,5% con respecto al año anterior. Pero el equipo de Salcedo no quiere quedarse donde está, sino seguir mejorando. Tras el paso dado la pasada semana, con la primera intervención de alargamiento de huesos a una afectada por acondroplasia, los traumatólogos preparan ya el siguiente paso: el alargamiento sin fijación externa, sustituyendo estos aparatos por clavos autoexpansibles electromagnéticos. Este sistema, que ya se usa en la Dexeus de Barcelona y en otros países, evita complicaciones a los pacientes. Los cirujanos implantan un clavo en la zona ósea con un motor que permite la elongación progresiva del hueso.

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