«Con el 'Brexit' teníamos bastante»

Los exportadores murcianos no ganan este año para sustos. Dejando a un lado los problemas de siempre asociados a la falta de agua y a la competencia de terceros países, les han crecido los problemas en el Reino Unido y en Estados Unidos. «Ya teníamos bastante con el 'Brexit'», apuntan. Mientras que siguen encajando los efectos de la devaluación de la libra, ahora se enfrentan a un posible frenazo, cuando menos, de las negociaciones para el tratado de libre comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos. La Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP) ha quedado tocada con el triunfo electoral de Donald Trump, que apuesta por proteger los productos norteamericanos con fuerte aranceles.

Las exportaciones murcianas a Estados Unidos alcanzaron el año pasado los 322 millones de euros, y con el tratado de libre comercio podrían crecer hasta un 30%, ya que las expectativas son positivas. Lo demuestra el hecho de que la ventas de la Región a aquel país han crecido a un ritmo tres veces superior a la media española. Más de 650 empresas de la Región tienen relaciones comerciales con Estados Unidos, que ahora son presas de la inquietud hasta conocer qué derroteros toma la Administración Trump. La patronal Proexport, Apoexpa, Ailimpo y Agrupal diseñaron una estrategia común con su apuesta por la TTIP que ahora ven en punto muerto.

A unos le afecta directamente, como al sector de la conserva, mientras que otros reciben los vaivenes de la cotización de la libra y del dólar, como apuntó ayer el presidente de la patronal Croem, José María Albarracín. La empresaria Esther Gómez incidió en la misma línea y se remitió a la conmoción que se produjo por la mañana en los mercados, antes de que abriera Wall Street. Confía en que las consecuencias no sean peores que las que provocó el 'Brexit' y espera que los mercados se tranquilicen. «Parece que todas las previsiones negativas se han cumplido este año», comentó.

El secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, recibió ayer varias llamadas de exportadores murcianos para intercambiar impresiones. Declaró a 'La Verdad' que es «prematuro» sacar conclusiones del resultado electoral. «No sabemos qué pasará, y menos sin tener contacto con ellos. Habrá que hablar con la nueva administración cuando llegue el momento para saber por dónde irán. Lo que sí es cierto es que cuando hay cambios de gobiernos y de partidos las transiciones son más lentas. Es previsible que la negociación de la TTIP se ralentice, pero hay que esperar», recalcó García Legaz.

El presidente de Proexport, Juan Marín Bravo, cree que la situación pinta mal para el tratado de libre comercio en el que tienen depositadas grandes expectativas. «Esperemos que no se cumpla el programa de Trump para proteger sus productos frente a terceros países. Que recapacite y piense que tiene que gobernar un gran país. De entrada, la situación no nos ayuda. Existe preocupación».

José García Gómez, presidente de la Asociación de Conserveros y Empresas de Alimentación (Agrupal), recuerda que hay «mucho en juego». «Para nosotros, EE UU es y seguirá siendo un mercado de referencia y de máxima transcendencia. Allí concurren todos los países para colocar sus productos, y nosotros lo hacemos en desventaja. Los demás tienen tratados comercio y nosotros no. Estamos castigados frente a China y Sudamérica, que son nuestros principales competidores, con aranceles del 15%. Por eso el TTIP es una magnífica oportunidad».

La Comunidad apela al «al sentido común»

El consejero de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo, Juan Hernández, lamentó que si el Gobierno del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, pone dificultades arancelarias o desde el punto de vista técnico a los intercambios comerciales, "al final estaríamos renunciando a un mercado que sería muy beneficioso para la economía europea, española y murciana en particular".

Hernández contestó de esta forma en una rueda de prensa y al ser preguntado por la llegada al Gobierno de Trump y la repercusión que podría tener sobre el Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP) que están negociando Europa y Estados Unidos.

"Yo creo que hay que esperar, primero que tome posesión el nuevo presidente, que forme su gobierno y que marque las líneas de su política de cara al futuro", señaló Hernández, quien puntualizó que las empresas murcianas exportan más de 300 millones de euros a los Estados Unidos, donde tienen un papel "muy preponderante" los sectores energético y de la alimentación.

Por ejemplo, destacó que el sector de la alimentación tenía puestas "muchas esperanzas" en el TTIP que se estaba negociando con Estados Unidos, que es la primera economía del mundo, con 17 billones de euros de PIB, seguida en segundo lugar por China con 10 billones y, a continuación, por otros países "en cascada" con dos y un billones de euros de PIB, entre los que se encuentra España.

El consejero explicó que las "señales recibidas hasta ahora" de Estados Unidos reflejan problemas "internos", no desde el punto de vista de generación de empleo, "sino de la capacidad salarial y el nivel de vida que tiene la gente". A su juicio, esto "lógicamente" ha provocado "ciertos elementos de incertidumbre que pueden explicar algunas causas de lo que ha sucedido políticamente".

"Si la respuesta frente a eso va a ser levantar barreras proteccionistas contra aquellos países que tienen mano de obra más barata, como Méjico o China, eso al final provocaría una cascada en el resto de países de levantar también barreras proteccionistas", advirtió Hernández.

Ahora que la economía internacional "no está creciendo con el vigor con el que los está haciendo en los últimos años", Hernández cree que levantar barreras proteccionistas "sería un problema que podría provocar el enfriamiento de la economía y las circunstancias y problemas que hemos tenido en los últimos años".

En este sentido, mostró su esperanza en que las autoridades públicas internacionales, europeas, y los distintos organismos públicos financieros y también privados "pongan sentido común y no haya ningún tipo de represalias".

En concreto, Hernández espera "que se siga apostando por la libertad de comercio internacional, que es lo que ha generado los mayores niveles de prosperidad, no solo a los países desarrollados, sino también a los países en vía de desarrollo y subdesarrollado: es lo que explica que haya cada vez más gente que tenga mejor bienestar de vida".

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