Prisión y multas millonarias a unos 'narcos' por traer cocaína en frutas

El Clan de los Murcianos comienza a sonar en los pasillos de los grandes tribunales. Algunos de los integrantes de esta organización de narcotraficantes, afincados en la Región, ya acumulan varias condenas y las investigaciones policiales apuntan a un posible nexo del grupo con un cártel del estado mexicano de Michoacán. El Tribunal Supremo acaba de confirmar una nueva condena -dictada por la Audiencia Nacional- a dos integrantes de la banda, vecinos de Murcia, por tratar de introducir por Algeciras dos contenedores con cocaína oculta en yucas y piñas.

La Sala de lo Penal impone a uno de ellos nueve años de cárcel y una multa de 1,2 millones de euros y al otro ocho años de prisión y una multa por el mismo importe. Uno de los 'narcos', según recuerda la resolución, ya fue condenado por tráfico de drogas en 2012 - a 18 meses y 500 euros de multa- y en 2015 -a 9 años de cárcel y multa de 15 millones de euros-. Además, el Supremo confirma la condena de ocho años y misma multa a un empleado de una de las empresas en las que se iban a recibir estos cargamentos de droga.

Los hechos, según explica la resolución, se remontan a noviembre de 2013, cuando, a raíz de la información obtenida por la Policía en otras operaciones, se localizó a dos murcianos que estaban realizando gestiones para importar a España varios cargamentos de droga dentro de contenedores que provenían de Sudamérica. Así, pusieron en marcha dos envíos de cocaína oculta en frutas. La droga partió de Costa Rica y llegó hasta el puerto gaditano de Algeciras. Como destinataria figuraba una empresa, ubicada en la localidad almeriense de El Ejido, aunque la droga iba a ser trasladada finalmente a otra compañía, con sede en la pedanía murciana de Espinardo. La primera, según consta en la resolución, fue utilizada sin que, ni siquiera los empleados de la misma tuvieran conocimiento de ello.

El 8 de abril de 2014, un dispositivo conjunto de Aduanas, Policía Nacional y Guardia Civil incautó en el puerto de Algeciras un contenedor con cajas de yucas en las que se ocultaban más de siete kilos de cocaína -que habrían alcanzado en el mercado un valor de 283.960 euros-. El 21 de abril de ese mismo año se interceptó otro contenedor, trasladado por los ahora condenados, con 14 palés de piña y yuca que escondían cerca de 9 kilos de esta droga -que habrían alcanzado en el mercado un valor de 33.546 euros-.

La resolución contiene múltiples conversaciones telefónicas 'pinchadas' en las que los ahora condenados hablan sobre los envíos.

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