El Supremo rechaza las dos querellas contra el Fiscal Jefe por su falta de fundamento

Han tenido las patas muy cortas. Las dos querellas que una desconocida entidad, denominada Asociación Justicia y Libertad, interpuso el pasado abril contra el Fiscal Superior de la Región, Manuel López Bernal, acaban de ser rechazadas por el Tribunal Supremo debido a su falta de fundamentación. Fuentes conocedoras del asunto confirmaron ayer a 'La Verdad' que el magistrado que había sido designado ponente con el fin de analizar los documentos y analizar si los hechos en ellos referidos presentaban apariencia delictiva, acaba de rechazar que sean admitidos siquiera a trámite y ha ordenado su inmediato archivo.

Con la decisión del Alto Tribunal se pone punto y final a un incidente que tuvo su arranque a principios del pasado marzo, cuando un letrado contratado por la Asociación Justicia y Libertad, que estaba recién constituida, interpuso dos querellas contra López Bernal ante la Sala de lo Civil y de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia.

El momento elegido para querellarse contra el máximo representante del Ministerio Fiscal en Murcia resultaba cuando menos llamativo, pues acababa de expirar su segundo mandato y se postulaba para ser reelegido en el cargo. De tal forma que tales denuncias, en las que se le atribuían supuestos delitos de tráfico de influencias, contra la ordenación del territorio y falsedad documental, podían significar un duro golpe a sus legítimas aspiraciones.

El recorrido de ambas querellas en el TSJ de Murcia fue mucho menos que escaso, toda vez que la Sala las archivó en el acto ya que, debido a la condición de aforado de la que disfruta López Bernal, eran competencia del Tribunal Supremo.

Tras esa decisión quedaba en manos de la Asociación Justicia y Libertad decidir si volvía a presentar los escritos ante el Alto Tribunal, que es lo que finalmente hizo unas semanas más tarde. Ahora, una vez analizado su contenido, el magistrado ponente ha optado por archivarlos al no apreciar vestigio alguno de delito, según las fuentes mencionadas.

Uno de las denuncias, interpuesta por un supuesto delito urbanístico, se refería a la construcción de la vivienda en la que reside López Bernal desde hace más de treinta años. Entre otras supuestas ilegalidades, aseguraba el querellante que el chalé había sido construido en zona protegida, talando numerosos árboles y que además toda la obra se había acometido sin licencia ni permisos del Ayuntamiento de Murcia.

El otro asunto se refería a la adjudicación de un contrato que la Consejería de Sanidad y Política Social otorgó, en torno al año 2012, a una asociación administrada por la hija del Fiscal Superior.

El hecho de que el Gobierno de la Nación lleve largo tiempo en funciones se ha traducido en que no se haya abordado la situación de la Fiscalía de la Región, al frente de la cual sigue López Bernal de forma interina.

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