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José Luis Mendoza.
La UCAM tacha de «radical, intolerante y anticonstitucional» al rector de la UMU

La UCAM tacha de «radical, intolerante y anticonstitucional» al rector de la UMU

La Universidad Católica exige a «los máximos responsables del Gobierno regional que se pronuncien ante esta grave injerencia»

Fuensanta Carreres

Sábado, 17 de septiembre 2016, 00:32

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El envite lanzado el jueves por el rector de la Universidad de Murcia (UMU), José Orihuela, quien propuso absosber la Facultad de Medicina de la UCAM para «acabar de raíz» con la polémica por las prácticas de los alumnos, elevó ayer varios tonos el nivel de crispación entre los responsables de ambas universidades. Las declaraciones de Orihuela, quien se refirió al conflicto como a «un cáncer que hay que extirpar», encontraron la réplica en el comunicado redactado por la Junta de Gobierno de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica, que mostró su malestar por «la falta de respeto y desprecio a los estudiantes, profesores, PAS y familiares de los alumnos de la UCAM». Para la institución privada, las declaraciones del máximo representante de la pública «nos parecen radicales, intolerantes y anticonstitucionales. Con ellas pone en peligro el sistema universitario y genera un conflicto innecesario», advirtieron en el comunicado. En la UCAM, presidida por José Luis Mendoza, consideran «muy grave que califique de 'cáncer a extirpar' la presencia de profesores y alumnos de Universidad Católica».

Los representantes de la UCAM dejaron además la pelota en el tejado del Gobierno regional, ya que en su comunicado exigieron que sus «máximos responsables se pronuncien públicamente ante esta grave injerencia del rector de la UMU».

El malestar de la UCAM, donde no entienden que Orihuela se queje de «falta de espacio para las prácticas de Medicina de la UMU y sin embargo proponga absorber a los alumnos de la UCAM», obedece a la inesperada reacción del rector de la pública, quien el jueves cargó las tintas contra la resistencia de la universidad privada a firmar el convenio que debe regular las prácticas de Medicina de los alumnos de la Católica, descolgándose con la propuesta de absorber a todos los estudiantes en su facultad. El origen de la tensión de las últimas semanas radica en la negativa de la UCAM a firmar, a unas semanas del inicio de las clases, el documento que les concedería el uso exclusivo de los hospitales de Cartagena (Santa Lucía y Rosell) y Lorca (Rafael Méndez). Por contra, la firma supondría la renuncia a los tres hospitales públicos de Murcia, el Morales Meseguer, Reina Sofía y La Arrixaca, que han quedado vinculados a la Universidad de Murcia en virtud del convenio que firmó el pasado mes de marzo con el SMS.

La Universidad Católica entiende en cambio que tiene «un convenio en vigor aprobado por el Ministerio de Educación, la ANECA y el Consejo de Gobierno para la realización de las prácticas en todos los hospitales de la Región, incluidos los de Murcia, sede de la UCAM». El convenio al que la Universidad Católica hace referencia en su comunicado de ayer data de 2014 y entra en colisión con el de la UMU, de marzo de este año.

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