AVE y Cercanías no hacen buenas migas

El sector ferroviario de CC OO ha advertido de las consecuencias que tendrá el plan de Adif para que los viajeros de Cercanías entre Murcia y Alicante realicen transbordos en San Isidro, cerca de Albatera. Se trata de una medida provisional, mientras se adapta a la alta velocidad una de las dos vías de la línea Murcia-Monforte. No hay fecha para esta maniobra, ya que depende del ritmo de los trabajos. Representantes del sindicato se reunieron con el director general de Transportes de la Comunidad Autónoma para advertirle de que esta propuesta acarreará muchas molestias para los viajeros y provocará descenso del tráfico.

La línea de cercanías Murcia-Alicante mueve más de 2,5 millones de viajeros al año y es una de las más activas del mapa ferroviario. El transbordo hará que los viajeros cambien de tren en San Isidro, donde se bifurcan la línea de alta velocidad Murcia-Monforte del Cid y la actual que discurre a través de Elche para llegar hasta Alicante. En la actualidad, los trenes de cercanías utilizan parte del plataforma de alta velocidad entre Murcia y Albatera, a través de una vía de ancho convencional que tiene que ser adaptada a los parámetros del AVE.

Mientras dura esta operación, se propone realizar el transbordo combinando los trenes. Unos irán por el trazado de ancho internacional (entre Murcia y San Isidro) y otros por el ancho convencional (de San Isidro hasta Alicante).

En una fase posterior, el tramo entre San Isidro y Alicante estará modernizado con vías de ancho internacional, aunque existe un problema en Elche, donde no se puede montar la catenaria por falta de altura en el túnel que atraviesa la ciudad.

Aún no hay fecha para el cambio, pero Antonio del Campo, que fue miembro del Consejo de Administración de Renfe en representación de CC OO, lo considera «un disparate». Así se lo hizo saber el director general de Transportes, que también lo rechazó, según aquel. La Consejería no se pronuncia a nivel oficial y un portavoz indicó ayer que están trabajando con Renfe para que los usuarios tengan el mejor servicio.

¿Y el resto de trenes?

Del Campo indicó que el transbordo alargará el viaje entre 10 y 15 minutos, con las molestias que ocasionaría a los usuarios. Prevé una pérdida de viajeros similar a la que se ha producido entre Valencia y Castellón, donde según este disminuyó un 40% el servicio de Cercanías. Asimismo, teme que se produzca un traslado a Alicante de medio centenar de trabajadores de Renfe. Igualmente, se pregunta cómo afectará a otros trenes que prestan servicio desde Cartagena y Lorca en dirección a Valencia y Barcelona.

Sostiene además que «no hay trenes eléctricos» para ese servicio combinado entre Murcia y Alicante. «Que digan de dónde van a mandar esos trenes. Los Civia circulan a 3.000 voltios y no pueden ir por la línea del AVE de 25.000 voltios. Hay otros dos modelos de trenes de media distancia, los S104 y S124, que están ocupados en Castilla-La Mancha, Andalucía, Galicia y País Vasco».

Demanda de Huermur

La Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Nacional, por otra parte, ha requerido por segunda vez a Ministerio de Fomento para que aporte la documentación requerida tras la denuncia que presentó Huermur contra la primera fase del acceso del AVE a Murcia, según informó esta asociación.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), por último, invertirá 62,7 millones de euros en la Línea de Alta Velocidad Madrid-Castilla La Mancha-Comunidad Valenciana-Región de Murcia. El Consejo de Administración aprobó ayer la adjudicación de los servicios de mantenimiento de infraestructura, vía y aparatos de vía. El contrato está desglosado en dos lotes, y el que afecta al trazado que llega hasta la Región de Murcia tiene un coste de 30.942.920 euros. Los trabajos comprenden la conservación de cerramientos, vallados y edificios técnicos, así como prevención de incendios y atención en incidencias.