«Le advertí a Rajoy de que la solución a la sequía era un trasvase del Miño»

Si a Manuel Fernández Enes se lo encontraran en una escalera, gallego de origen como es, les daría los buenos días y seguiría decidido, hacia arriba o hacia abajo, su camino. Y no porque viva en Murcia desde hace 38 años. Ni porque incumpla el topicazo del gallego y la escalera. Lo haría porque siempre pone tanta ilusión en cuanto se propone que muy rara vez no lo consigue. De hecho, como presidente de la Casa Regional de Galicia en Murcia ha logrado alcanzar los 150 socios, lo que le permite al centro el máximo reconocimiento de la Xunta gallega. Ahora andan preparando su tradicional muestra para la Feria de Septiembre, esa que concita a miles de murcianos en torno al pulpo, el churrasco, el marisco, los quesos y los vinos blancos... todas esas cosas que a pocos les gustan, vaya.

-Casi cuatro décadas en Murcia y mantiene su acento gallego intacto. ¿Eso se lleva en los genes?

-(Ríe). En abolsuto. Sucede que tengo mucha relación con gallegos, tanto en el centro como en mi trabajo [Manuel trabaja para el Grupo Inditex en varias comunidades]. A eso se suma que, incluso en Murcia, hablamos mucho gallego.

-¿Tantos gallegos hay en la Región?

-Es muy difícil calcularlo. Por la cuestión de la protección de datos y eso. Calculamos que la cifra rondará los 2.000 paisanos.

- ¿Y en qué municipios hay más?

-Están repartidos por toda la Región. Quizá una gran parte reside en Cartagena, por aquello de la marina. Aunque, curiosamente, no son los más activos en nuestro Centro Regional.

-¿De qué zonas de Galicia provienen la mayoría?

-Vinieron muchos de El Ferrol, también por cuestiones relacionadas con la mar.

-¿Y usted?

-Yo vine [suena el 'vine' gallego puro] de la costa de Lugo. De la famosa Playa de las Catedrales.

-Por allá la llaman morriña. ¿La ha sentido alguna vez?

-Soy gallego de origen, pero llevo muchos años en Murcia. Y hay una gran similitud entre ambas regiones: gente de carácter abierto y acogedor. Por eso hay tanto trasiego de gallegos a Murcia y al revés.

-Puede que se parezcan, salvo por el agua, que allí sobra...

-(Vuelve a reír). Ya le dije al presidente Rajoy, durante una visita que hizo a Murcia, que impulsara un canal desde el Miño y resolviera así nuestro problema con el agua.

-En eso estaría pensando... No estaría mal, no. Aunque igual se la quedaban antes en otras comunidades.

-Bueno. Lo del presidente lo recuerdo como una anécdota. Pero es verdad que en su día se llegó a calcular el proyecto: con lo que costó la Exposición Universal de Sevilla se podría haber realizado ese trasvase.

-¿Cómo han afectado al Centro las nuevas tecnologías y lo cerca que ahora parece que está todo en el mundo?

-Realmente corrimos el riesgo de quedar un poco descolocados. Por eso decidimos impulsar lo más tangible, como por ejemplo las muestras gastronómicas, la organización de conciertos...

-En la próxima Feria de Septiembre abrirán de nuevo su muestra.

-Como cada año. Ni imagina la cantidad de murcianos que disfrutan de las bondades de la gastronomía gallega: pulpo, lacón, churrasco, quesos y vinos...

-Vamos, de lo malo, lo peor...

-(Risas) Sin duda. Son cosas que a nadie les gusta. También actuará 'Luar Na Lubre', un conocido grupo folk. Pueden recoger sus entradas en el Centro Gallego de El Malecón.

-¿Sabe que en la Edad Media eran célebres las gaitas murcianas, que luego olvidamos como acostumbramos por estas latitudes?

-Cierto. Queremos comenzar ahora a colaborar con un grupo que intenta recuperar aquí la tradición.