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Ángel David (d) sujeta un fusil de asalto mientras recibe indicaciones de un rebelde prorruso.
Detenido en Cartagena uno de los ocho españoles que lucharon con los prorrusos

Detenido en Cartagena uno de los ocho españoles que lucharon con los prorrusos

Ángel David A. M. se marchó el pasado verano a Ucrania y ahora Interior les acusa a él y a sus compañeros de asesinato, tenencia de armas y explosivos

MELCHOR SÁIZ-PARDO

Sábado, 28 de febrero 2015, 00:50

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Ha pasado de ser brigadista internacional en Ucrania a convertirse en un reo tras pisar territorio nacional. El cartagenero Ángel David A. M., de 22 años, es uno de los ocho combatientes españoles detenidos ayer por la Policía Nacional tras regresar a España de su participación en el conflicto de la región de Donbass, donde combatió en las filas de los rebeldes prorrusos. Las detenciones de la denominada 'Operación Danko' arrancaron ayer al alba, a las 6.30 horas, y, según pudo confirmar 'La Verdad', Ángel David fue trasladado de inmediato a la Comisaría de Cartagena.

El Ministerio del Interior les imputa diversos delitos, entre ellos, asesinato, tenencia de armas y explosivos y actos que atentan contra los intereses de España. La 'Operación Danko' se desarrolló a caballo entre la Región de Murcia, Asturias, Cataluña, Madrid, Extremadura y Navarra. En el operativo se realizaron varios registros y junto a este joven cartagenero han sido detenidos otros siete jóvenes, cuyos nombres responden a las iniciales R.M.P., A.I.B, S.B.V., A.R.S., B.L.M., H.A.P. y D.S.A.

Según fuentes de la investigación, el operativo continúa abierto. Entre los arrestados hay tres exmilitares del Ejército de Tierra, que tenían formación en el uso de armas y material de guerra. De hecho, se sospecha de que participaron en acciones armadas en la primera línea de fuego junto a grupos separatistas prorrusos.

Todos los detenidos, según las mismas fuentes, tienen edades comprendidas entre los 20 y 30 años, son militantes comunistas, y habrían llegado a Ucrania durante el pasado año de la mano de la Liga Europea Prorrusa. Los arrestados han regresado ahora a España después de varios meses en el frente.

El joven cartagenero estaba en paro y era afiliado del Colectivo de Jóvenes Comunistas (CJC), una rama juvenil del Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE). Este último es una escisión de ultraizquierda del Partido Comunista de España, la formación del histórico líder y figura de la Transición Española a la democracia Santiago Carrillo. En esta línea, las mismas fuentes precisaron que la mayoría de los arrestados, miembros del colectivo Acción Antifascista, habrían estado encuadrados en la denominada 'Brigada Internacional Carlos Palomino', integrada en el Batallón Vostok.

Los rostros más conocidos, por sus numerosas intervenciones en vídeos de propaganda prorrusos son Rafael M. P., de 27 años, y Ángel D.R., de 22. El Ministerio del Interior aseguró ayer que los detenidos se incorporaron a los grupos separatistas prorrusos, en el bando que lucha por la independencia de las regiones ucranianas de Lugansk y Donetsk. En el caso del cartagenero, éste hizo escala en Kiev.

La Dirección General de la Policía detalló que durante su estancia los arrestados «compartieron y difundieron a través de las redes sociales su entrenamiento, exhibiendo uniformes paramilitares, fusiles de asalto 'kalashnikov', artefactos y dispositivos explosivos». Además de manifestarse «a favor de la lucha armada de los secesionistas violentos».

El departamento que dirige Jorge Fernández recordó que «estas actividades pueden ser constitutivas de delitos que comprometen la paz o la independencia del Estado, al tratarse de españoles que, al participar en el conflicto armado, violentan la neutralidad que España ha de mantener en relación con la Comunidad Internacional».

El inicio de la investigación

La 'Operación Danko', según informó ayer EP, fue iniciada a partir de una investigación de la Comisaría General de Información, que rastreó las actividades de los ocho arrestados en las redes sociales, y una querella de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que fue admitida a trámite por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, Santiago Pedraz.

Los servicios de información habían tenido constancia del desplazamiento de varias decenas de jóvenes españoles (de ideología comunista en su mayoría) al este de Ucrania para integrarse en las filas de los rebeldes pro rusos. Los investigadores también recabaron en las redes sociales varios vídeos en los que daban cuenta de sus presuntas hazañas en el frente. En algunos difundidos en Facebook y Youtube, aparecía Ángel David portando armas.

En uno de ellos, este joven de Cartagena aparece con otro de los detenidos, Rafael M., natural de Asturias, y ambos aseguran que quieren imitar a las Brigadas Internacionales que acudieron a la Guerra Civil española en apoyo del Gobierno republicano frente al bando nacional de Franco. Los dos declaran que «necesitan difundir la verdad que los medios de comunicación ocultan, como ocurrió en el 36 en España».

En una entrevista que ambos concedieron al canal de televisión francés France 24, el pasado mes de agosto, llegaron a asegurar que estaban «dispuestos a todo» con tal de «luchar únicamente por la paz y la libertad de esta gente».

Fuentes jurídicas justificaron que esta operación se ha llevado a cabo para tratar de poner coto «a este fenómeno emergente y evitar actuaciones en el extranjero que podrían ser consideradas como terrorismo y que tendrían como objetivo aterrorizar a la población civil». La Fiscalía de la Audiencia Nacional esperará a las declaraciones de los detenidos ante el juez para decidir si pide su ingreso en prisión.

De momento, considera que estos actos pueden ser constitutivos de presuntos delitos relacionados con la cooperación en asesinatos y homicidios, y tenencia y depósito de armas.

El juez no ordenó los arrestos

En el conflicto en el que participaron los detenidos, hay cientos de civiles muertos, la mayoría ucranianos. Algunos de estos actos han sido calificados de acciones terroristas por las autoridades de aquel país.

El magistrado se declaró competente para investigar estos hechos en virtud del artículo 23.3 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que establece la potestad de este tribunal para investigar «los delitos que hayan sido cometidos fuera del territorio nacional, siempre que los criminalmente responsables fueren españoles o extranjeros que hubieran adquirido la nacionalidad española con posterioridad a la comisión del hecho».

La labor del juez se limitó a autorizar los registros practicados, pero no ordenó las detenciones que fueron realizadas por agentes de la Policía Nacional. Al cierre de esta edición, el cartagenero Ángel David fue puesto en libertad con cargos, al igual que el resto de los siete detenidos.

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