Cándido Méndez considera urgente elevar el salario mínimo en España

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, aseguró ayer en Murcia que «el Gobierno debería llegar a la conclusión de que hay que aumentar la cuantía del salario mínimo interprofesional (SMI) en 2015 de manera significativa». La decisión, advirtió, «no puede ir más allá del Consejo de Ministros de la próxima semana».

Momentos antes de clausurar la Jornada 'La Seguridad y Salud Laboral en la Negociación Colectiva', celebrada en la sede de UGT-Murcia, Cándido Méndez explicó que «hay que seguir profundizando en la mejora de situaciones de gran dificultad» y, en ese sentido, consideró urgente el aumento del salario mínimo. Actualmente, el SMI está fijado en apenas 645 euros al mes, con lo que quienes cobran esta cantidad han perdido «más de cinco puntos de poder adquisitivo a lo largo de los últimos años». El SMI en España es «uno de los más bajos de Europa».

Contrariamente a lo que señalan algunos economistas, «la subida del salario mínimo interprofesional no contrarresta la creación de empleo», sino más bien al contrario, defendió. «Supondría apuntar hacia una senda de mejora del consumo de las familias españolas, lo que vendría a favor, nunca en contra, de la creación de empleo», aseguró.

El secretario general de UGT advirtió, asimismo, que la subida de este sueldo mínimo «supone ir reduciendo los niveles de discriminación», pues «hay muchos trabajadores con un salario escaso». Por su parte, el secretario general de UGT Murcia, Antonio Jiménez, defendió el papel de la negociación colectiva, que «puede hacer mucho más de lo establecido legalmente». Ya por la tarde, Cándido Méndez y Antonio Jiménez participaron en una asamblea de trabajadores de la empresa Cespa (Servicios Urbanos de Murcia, SA). Los líderes nacional y regional del sindicato reclamaron que estos empleados «puedan acceder a una contratación a tiempo completo», ya que únicamente trabajan los fines de semana y las fiestas.

Situación «injusta»

Es una situación «injusta» que afecta a un centenar de empleados de Cespa, sostuvo Jiménez, quien lamentó que la empresa «utilice los contratos de relevo cuando se producen jubilaciones anticipadas y se acuda a empleados de fuera cuando estos empleados llevan siete u ocho años vinculados a Cespa». En esta línea, Méndez advirtió de que en España y Europa «el empleo que se está creando es empleo de carácter temporal, precario, de escasa viabilidad». De hecho, en España «está aumentando la contratación a tiempo parcial, que no resuelve los problemas de las familias españolas», como es el caso de Cespa, aseguró.

Antonio Jiménez recalcó que los trabajadores de Cespa «no pueden salir adelante con ese contrato y en la propia empresa hay relevos de trabajadores que se jubilan», por lo que pidió que se «resuelva esta situación».