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Helicóptero accidentado en la extinción del incendio de Almansa.
Compañeros del piloto murciano fallecido achacan el accidente a la falta de medios

Compañeros del piloto murciano fallecido achacan el accidente a la falta de medios

Durante las labores de extinción del incendio, volaba sin copiloto en el helicóptero

LV

Lunes, 15 de septiembre 2014, 01:00

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Los compañeros de Fernando Fernández Baraza, el piloto murciano que perdió la vida a última hora de la tarde del sábado al estrellarse su helicóptero cuando trabajaba en la extinción de un incendio forestal en Almansa (Albacete), creen que estaría vivo si hubiese volado con un copiloto. Los servicios de extinción de incendios también han sido víctimas de los recortes y estos helicópteros cuentan con menos medios humanos que en el pasado.

«Si hubiese habido dos pilotos esto no habría ocurrido». Así se lamentó ayer Felipe, piloto de emergencias y amigo, además de compañero, de Fernando Fernández. «En los incendios hay mucho humo, apenas se ve, hay mucha comunicación, hay muchos medios que se cruzan y el peligro es muy grande. Por eso, como la mayoría de los helicópteros salen con un solo piloto, éste tiene más boletos de sufrir un accidente», indicó el compañero del piloto fallecido.

El siniestro que costó la vida a Fernando Fernández, casado y padre de un niño de seis meses, está siendo investigado por peritos de la Comisión de Accidentes de Aviación del Ministerio de Fomento que llegaron ayer hasta el lugar del siniestro: un campo de cereal de Alpera (Albacete) en el que el piloto se estrelló tras haber dejado a sus compañeros de la brigada trabajando en el incendio y de regreso a la base de Carcelén. Un error humano o un fallo del rotor de las hélices se barajan como causas del desgraciado siniestro. En cuanto al incendio de Almansa, quedó controlado ayer por la tarde, después de que hubieran ardido unas 400 hectáreas de monte bajo y pinares. Su origen pudo ser uno de los muchos rayos que cayeron en la zona en los últimos días, según el alcalde de la localidad, Francisco Núñez. En la zona, continuaron trabajando ayer 20 medios terrestres, dos aéreos, y 85 personas.

Precisamente, cuando regresaba a la base de Carcelén, tras haber participado en las tareas de extinción el sábado, el piloto murciano Fernando Fernández Baraza sufrió un accidente que le costó la vida.

El Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (Copac) lamenta el accidente «trágico» ocurrido en Alpera (Albacete) y traslada sus condolencias a los familiares y compañeros del fallecido. Asimismo, el Sindicato Independiente de Bomberos Forestales expresó el pésame por la muerte de este piloto, del Operativo de Incendios Regional con base en Villahermosa (Ciudad Real).

Desde el Copac recuerdan, además, que en la actual campaña de extinción de incendios ya han fallecido dos pilotos -en la última década han sido 23 las personas que han perdido la vida- y esperan que la Comisión de Investigación de Accidentes de la Aviación Civil se ponga en marcha «cuanto antes para esclarecer lo ocurrido y que emitan las recomendaciones que eviten sucesos similares, con el correspondiente seguimiento de las mismas para garantizar su cumplimiento». Para lograrlo, el Copac pone todos sus conocimientos y experiencia en operaciones aéreas al servicio de la investigación del desgraciado suceso.

También recuerdan que el accidente «se produce apenas una semana después de que el Consejo de Ministros aprobara el Real Decreto sobre las actividades aéreas de lucha contra incendios, búsqueda y salvamento, que no entrará en vigor hasta junio de 2015. La normativa, orientada a regular los trabajos aéreos e incrementar su nivel de seguridad, pretende combatir la alta siniestralidad que se registra en España», explican.

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