Gran Hermano: Sonia abandona el plató, 'avinagrada', y se pierde la final

La última gala de Gran Hermano Catorce dejó momentos que escribirán las líneas de la historia del programa de Telecinco. Una nueva ganadora, experiencias aún no vividas en el 'reality show' y momentos que subían la tensión en el plató de Gran Hermano.

Mercedes MIla se ha convertido en esta decimocuarta edición de Gran Hermano en protagonista indiscutible de cada gala. En ocasiones el poco espectáculo que suscitaban los concursantes del programa necesitaba una chispa para encender el fuego de la audiencia y la presentadora se ha encargado de poner el gas en cada gala. Anoche Mercedes Milá, con la participación de Sonia, protagonizó uno de los momentos más sonados de la última gala. Desde que fue expulsada, la canaria ha querido tener un minuto (o dos) de protagonismo en cada programa al que ha acudido y anoche, en la final, no podía ser menos.

Mercedes Milá se dirigió a Sonia llamándola, con aparente inocencia, "cara de vinagre". La canaria respondió en un primer momento con una sonrisa pero, rápidamente, Sonia despertó de su momentáneo ensueño y respondió a la presentadora diciéndole: "Me has faltado el respeto y no puedo tolerarlo". Tras estas palabras, Sonia se levantó y abandonó el plató de Gran Hermano. Mercedes Milá le dijo a Kristian que si quería podía acompañar a su novia, a lo que 'el pelocho' respondió que no. "Yo me quedo" contestó. Una decisión que el de los pelos locos tomó con autonomía y por primera vez no siguió los pasos de su amada, tal como tenía acostumbrada a la audiencia. No se sabe si más tarde Sonia le echó en cara a Kristian esa decisión.

Con este desplante Sonia se perdió la final de Gran Hermano y tuvo que verla entre bambalinas. El programa siguió su curso y el público echó en falta la presencia de la canaria, para suerte de algunos de los entrevistados, en especial Igor, a quien a buen seguro la canaria tendría palabras poco amorosas que decirle. En las redes sociales la actitud de Sonia tuvo numerosas reacciones y una vez más, el público se dividió en opiniones al respecto. Por un lado, algunos apoyaron la reacción de la canaria y valoraban que se hubiese atrevido a plantar cara a Mercedes Milá en mitad de una gala. Los seguidores de Sonia calificaban su comportamiento como una lección de educación. Algo muy diferente opinaban los anti-wallistas, quienes celebraban que Sonia hubiese abandonado el programa para no tener que verla de nuevo en acción. Decían de su actitud que era "una pataleta de niña pequeña" o "ahora me enfado y no respiro", comentaron los tuiteros en la red social.

Con el abandono de Sonia, ya van dos las veces que un concursante ha abandonado el plató de Gran Hermano. La vez anterior fue Noemí Merino quien se fue en plena entrevista con Mercedes Milá, aunque a ella la arrastró su madre, cansada de la situación de acoso que vivía su hija.

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