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ANDRÉS EGEA , MURCIA
Lunes, 25 de marzo 2013, 15:09
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Victoria del UCAM en un encuentro comprometido que se convirtió en una feria de triples durante el tercer cuarto. Con el encuentro igualado a aciertos y errores, los de Quintana consiguieron un 7 de 8 en triples durante el tercer cuarto, que le sirvió para irse en el marcador y jugar a placer casi hasta el final. En esta ocasión sí funcionó el tiro exterior con Ragland, Gatens y Barlow en plan letales. Pero si efectivo fue el ataque, no lo fue menos la defensa impuesta por el UCAM sobre los hombres grandes del rival. Así puso punto y final el conjunto murciano a una mala racha de cuatro derrotas, a lo grande y ante un equipo de Euroliga.
El primer cuarto fue por barrios. Primero fue el Unicaja el que se puso por delante 0-8 merced a los errores en el ataque local. Los murcianos conseguían posiciones claras, pero no estaban nada certeros. Pero tras los dos primeros minutos, el UCAM se puso las pilas y de qué manera. Con un juego rápido y un buen rebote ofensivo los locales consiguieron un parcial de 13-0 que les sirvió para darle la vuelta. Resepa, técnico visitante, tuvo que cambiar de base porque el rival se le iba en el marcador (13-8). A partir de ese momento y tras los primeros cambios, el encuentro se niveló aunque era el UCAM el que marchaba por delante. Eso sí, Quintana tenía un grave problema, que Lewis y estaba con dos faltas. El entrenador local manifestó su malestar con la labor arbitral en el segundo cuarto y a las primeras de cambio fue amenazado con una técnica. Lo cierto es que los colegiados se equivocaron y perjudicaron a los murcianos y la grada también se reveló ante tal injusticia. La igualdad se mantuvo en los segundos diez minutos aunque eran los visitantes los que mandaban en el electrónico. Urtasun, inspirado en ataque, tiro de su equipo mientras que Ragland era el que ponía el ritmo del partido, seguramente para que el rival pagase el esfuerzo realizado el pasado jueves en la Euroliga. Aunque el UCAM tuvo una posesión para empatar antes del descanso, no lo consiguió (33-35). Lewis con tres faltas, Tillie con dos y Berni con 0 de 3 en triples, eran los grandes problemas del conjunto murciano.
Tras el descanso el Unicaja volvió a repetir la diferencia de cuatro puntos (33-37), pero un parcial a base de triples del UCAM de 16-2, le permitió lo que en otras ocasiones no, practicar un basket control que le permitiera jugar con mayor tranquilidad. Ragland, Gatens, Jasen, Berni y Barlow acertaron desde la línea de 675 y el conjunto murciano logró irse 59-44. La serie local en triples fue colosal, 7 de 8. En el último cuarto y jugando con dos bases para que no se le fuera el encuentro, el UCAM estuvo más listo que su rival, aprovechándose que mandaba en el marcador. Los triples ya no entraban con tanta facilidad, pero defendió bien. El Unicaja se acercó un se puso 73-68 con un ataque y tiro para situarse aún más cerca de un minuto para el final, pero falló el tiro y Ragland anotó un triple en el ataque posterior que sirvió para sentenciar el partido (76-68).
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