Un detenido por tráfico de medicamentos ilegales y tabaco de contrabando

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado durante los últimos meses una operación policial orientada a erradicar el tráfico ilegal de medicamentos en Cieza, que se ha saldado con la detención de la persona que regentaba un establecimiento público de la localidad, desde donde supuestamente se distribuían productos farmacéuticos de forma ilícita.

Los agentes han incautado 2.000 dosis de medicamentos de origen ruso, que tras ser analizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, se ha determinado que se trata de productos que perjudican gravemente la salud pública por estar prohibida su importación y distribución sin prescripción médica en España y Unión Europea.

La Guardia Civil inició la investigación al detectar la comercialización de productos farmacéuticos de distribución ilícita en Cieza, y así se logró ubicar un establecimiento público de la localidad e identificar plenamente a la persona que lo regentaba.

Los productos, aparentemente ilícitos, antibióticos, analgésicos, antidepresivos, antisépticos y relajantes musculares entre otros, procedían de Rusia y eran introducidos de forma ilícita.

Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, se efectuó una inspección en el establecimiento relacionado con la investigación, donde se incautaron 2.000 dosis de medicamentos.

Los productos incautados fueron remitidos a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios para su análisis, que posteriormente ha emitido un informe técnico determinando que los productos analizados ocasionan un grave riesgo para la seguridad ciudadana al no estar autorizada su introducción en España y Unión Europea, además de perjudicar gravemente la salud pública.

Además se ha iniciado un expediente sancionador por contrabando de tabaco, también de origen ruso, que se encontró durante la inspección del local, al tratarse de tabaco de ilícita distribución en España.

Tanto los medicamentos como el tabaco, de origen ruso e introducidos ilegalmente en España, eran comercializados desde el establecimiento público, que carecía de cualquier tipo de autorización para la distribución de éstos.