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Ginés Jiménez Buendía, tras la entrevista realizada en Madrid. / GUILLERMO CARRIÓN / AGM
Ginés Jiménez: «En dos meses como máximo volveré a mi puesto de trabajo»
JEFE DE LA POLICÍA LOCAL DE COSLADA

Ginés Jiménez: «En dos meses como máximo volveré a mi puesto de trabajo»

El 'sheriff', natural de Alcantarilla, apunta a la pérdida del poder por el PP en Coslada y a los celos de la Udyco como los motores de su imputación en la 'Operación Bloque'

GUILLERMO HERMIDA

Domingo, 31 de mayo 2009, 14:39

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A Ginés Jiménez no le hace ninguna gracia el sambenito de de Coslada que le persigue desde que, hace poco más de un año, estallara la Operación Bloque y fuera detenido junto a otros 27 agentes de la Policía Local de Coslada, que él dirigía desde 1986. Después de pasar casi once meses en prisión preventiva acusado de extorsión, amenazas, blanqueo de capitales, prevaricación y cohecho, Jiménez reitera su inocencia y cree que detrás de la operación de la Unidad contra la Delincuencia y el Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional se esconde una trama política y celos entre cuerpos policiales para acabar con él.

-Ha pedido su reingreso en su puesto al mando del cuerpo. ¿Cuándo se producirá?

-Creo que en un plazo máximo de dos meses. Yo entré por concurso oposición y sólo una decisión judicial puede apartarme de mi puesto. Ahora estoy suspendido provisionalmente por un decreto del Ayuntamiento, y cobro sólo el 25% de mi sueldo.

-¿En qué momento se encuentra el proceso por la Operación Bloque?

-Ha pasado un año, pero aún no se ha cubierto ni el 30% del proceso. Queda mucho por hacer, no habrá juicio hasta dentro de al menos dos o tres años.

-Sin embargo, el juicio mediático ya está casi completado, algo que usted criticó mucho como antiguo periodista...

-No soy licenciado en Ciencias de la Información, sino en Filología Hispánica por la Universidad de Murcia. Por eso me duele que se filtren desde fuentes policiales expresiones como «mafia policial», una mafia de pacotilla que ahora se ve que se está desmontando. Pero duele que haya habido un juicio mediático pararelo que han alimentado esas fuentes. De no ser por ello, habríamos salido antes en libertad.

-¿Cómo afirma que se están desmontando esas acusaciones?

-Han usado a empresarios de hostelería para ir a por mí. Ahora se está viendo que tuvieron interrogando a gente hasta ocho horas para lograr la declaración que ellos querían. Y hemos denunciado esa situación, denuncia que ha sido admitida a trámite. En ella afirmamos que hemos sido objeto de un linchamiento policial. La Audiencia Provincial ha incluido a los instructores como denunciados, pero querríamos imputarlos.

-¿Cree que su caso tiene que ver con celos profesionales?

-Mi actuación desde 1986 siempre ha sido muy visible, manteniendo los niveles de delincuencia baja pero al mismo tiempo potenciando la labor de la Policía Local. Y eso no caía bien. El golpe ha sido premeditado contra la figura del policía local dentro del modelo actual de fuerzas de seguridad. Hay celos y en Coslada estaban exacerbados.

-¿Es entonces El Bloque una invención?

-No, pero se ha usado a un grupo de amigos dentro del cuerpo y se le ha criminalizado. Uno de ellos, Carlos Martínez Gil, tiene relación con un tema de prostitución con tres rumanos, que es una investigación aparte. Pero todo ello se mezcla en una coctelera a base de informes y atestados con muy buena redacción, pero poca veracidad, y se acaba usando contra mí. Se dice que Carlos era el brazo ejecutor, que él se refiere a mí como «el jefe», pero... ¿cómo quiere que llame a su jefe en la Policía Local?

-Afirma que este caso es una operación orquestada desde varios frentes, incluido el político...

-Sí. Los que abren el camino son los atestados policiales que realiza un inspector del Cuerpo Nacional de Policía que perteneció a la ejecutiva del PP en Coslada. No hay problemas con esta afiliación, pero que pertenezca a una ejecutiva llama la atención. El PP pierde el poder en Coslada porque pierde el apoyo de José Huélamos [ex alcalde] en 2007. Y me culpan a mí de ello. Y el PP aprovecha también a parte de la plantilla policial, sobre todos descontentos y cercanos al sindicato CSI-CSIF. También usan a empresarios, algunos afines al PP, para dar cuerpo a las acusaciones de extorsión. Pero es el inspector Dámaso Rodríguez el auténtico artífice de esta operación.

-Pero hay numerosas declaraciones sobre extorsiones a locales o sobre las amenazas...

-¿Usted cree que en una población moderna de 90.000 habitantes, éstos aguantarían 21 años que el alcantarillero, que Ginés les impusiera su ley y nadie denunciara? Y si hacía falta información interna del Ayuntamiento, se iba al PP. Si hacía falta una declaración de una mujer que dijera que yo le puse una pistola en la cabeza, también la había: Dolores Veguía, también del PP. Una señora que aparece al año y medio de cerrar el bar y aparece en la Fiscalía... Eso chirría, eso huele.

-Supongo que la repercusión de su caso en Murcia y en concreto en Alcantarilla le habrá afectado.

-Duele cuando se te criminaliza, y mis hermanos y mi madre habrán sufrido. Pero también sé que mis paisanos han sido muy prudentes y no han querido entrar en el circo mediático, incluyendo al ex alcalde Francisco Zapata. Me duele alguna declaración dándome caña de Pedro Luis Cascales, que quiso hacer leña del árbol caído.

-¿Cómo le trata la gente de Coslada tras estallar el caso?

-Esto es como todo, al que se le ha llevado la grúa el coche o al que se ha detenido al hijo por llevar unas papelinas o pelearse pues se ha quedado de enemigo. En esos años me tocó estar al pie del cañón y mojarme. Me desgasté. Los enemigos se han apuntado ahora al circo mediático, pero hay mucha gente callada y expectante.

-¿Qué tipo de experiencia supone pasar por la cárcel para alguien que ha llevado durante años placa y uniforme de defensor de la ley?

-Muy mala, es algo muy triste. Psicológicamente hay que estar muy preparado para que no te afecte. Hay que estar sereno y tranquilo. Ayuda ver a gente de Coslada o Alcantarilla hacer declaraciones positivas.

-¿Fue un golpe duro que se imputara a su mujer y a su hijo?

-Mucho, porque ellos dicen que era para que se aclarara el tema de las cuentas. Pero se podría haber aclarado sin detenerles.

-El tema de su patrimonio también está siendo escrutado con lupa por los investigadores...

-Dicen que tenía pisos hasta en Rumanía. ¡Yo no he estado en mi vida en Rumanía! Además, de tres pisos nada. Tengo el que pagué con mi sueldo, un sueldo de 4 ó 5 mil euros al mes. Y luego, al terminar de pagarlo, usamos la cuota para dar la entrada de otro. Y mi hijo tuvo hasta que pedir un préstamo personal para dar la entrada de otro piso.

-¿No ha vuelto a Murcia desde que estalló el caso?

-No he podido. Ahora en las Fiestas de Mayo hubiera querido ir a Alcantarilla. Pero sé que mis hermanos están muy liados con sus negocios de hostelería. Y luego no puedo tomarme un respiro en mi defensa, incluida la mediática.

-¿Le molesta que le llamen sheriff ?

-Por supuesto. Es que yo no iba dejando la pistola en la barra y pidiendo copas o comidas sin pagar. Luego, ya más que es que me han catalogado de Vito Corleone de Coslada, el enemigo público número uno. Se han dicho tantas cosas... pero yo me considero inocente y tengo la ilusión de que vamos a salir absueltos y ejerceré mi profesión. Yo no he sido ningún mangante ni ningún chorizo. Tal vez lo único malo es que me he hecho muchos enemigos.

-¿Cree que finalmente toda la operación quedará en agua de borrajas?

-Yo creo que ya ha perdido mucha fuerza, que son tres asuntos que se han querido unir en un timo y un fraude a la autoridad judicial. No hay unión entre lo del Bloque, lo de Ginés y lo de Carlos. Presiento - mi abogado dice que está seguro- que la Operación Bloque se va a quedar en muy pocas imputaciones.

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