Las mentiras y medias verdades de Sandoval

¿ Se puede declarar una cosa un viernes y la contraria pocos días después? Y más aún, ¿rasgarse las vestiduras públicamente por lo mismo que se autorizó pocos días antes? La directora general de Transportes y Puertos de la Consejería de Obras Públicas, Carmen Sandoval, ha demostrado que sí.

La directora de Transportes conocía de antemano y asumió la supresión de los dos servicios de Renfe entre Murcia y Cartagena realizada el pasado lunes. Es más, incluso recomendó a la compañía que fueran los trenes con salidas de Murcia a las 18.08 horas, y de Cartagena a las 19.31 horas, los que debían ser suprimidos, según queda claro en una carta -en poder de- firmada por Sandoval y enviada el 27 de marzo a Francisco J. Prats Herrero, gerente de Relaciones con las Comunidades Autónomas y Concertación de Servicios de Renfe.

A pesar de ello, una semana después, tras denunciar los sindicatos las intenciones de Renfe y publicar este periòdico la reducción de los trenes, la Consejería de Obras Públicas calificaba de «impresentable» el recorte y la propia Sandoval expresaba con rotundidad su rechazo.

Según explicó ayer Carmen Sandoval -una vez dada a conocer por la Delegación del Gobierno su carta del 27 de marzo en la que daba el visto bueno al recorte de dos servicios-, «eran cuatro los horarios que Renfe pretendía que se suprimieran y, tras una dura negociación, la Dirección General de Transportes consiguió que fueran solamente dos».

De acuerdo con esta misma versión, Renfe «requirió que se indicaran por escrito los dos horarios que debían retirarse en base a su menor utilidad social».

En respuesta a este requerimiento, y en lugar de mantener su firme rechazo a la reducción de los servicios que ha mantenido públicamente después de estallar la polémica, la directora de Transportes lo que hizo fue señalarle a Renfe por carta los dos horarios que debía sacrificar.

En dicha misiva, Sandoval argumentaba que el tren 14518 con salida de Murcia a las 18.08 horas «ha experimentado un descenso en la demanda anual total», de un 6,12% en 2007, bajada que se había mantenido en 2009, por lo que, afirmaba, «consecuentemente parece razonable la supresión del servicio del tren 14518».

A la misma conclusión llegaba Sandoval tras analizar la «clara tendencia decreciente de la demanda anual» del tren 14519, con salida de Cartagena a las 19.31 horas.

Al final de la carta, la directora de Transportes confirmaba la conveniencia de suprimir ambos trenes «todo ello, con la mayor urgencia, y a ser posible a partir del 1 de abril de 2009».

Tras los pronunciamientos en contra realizados en los últimos días, Sandoval volvió sin embargo a ponerse en contacto con Renfe anteayer y le pidió por escrito, diez días después de hacer lo contrario, «la necesidad de reestablecer los servicios de media distancia en la relación Murcia-Cartagena 14518 y 14519».

La directora de Transportes concluía así su carta a Francisco Prats Herrero: «Como sabrás, existe una demanda social importante, por lo cual te ruego que dicho reestablecimiento se realice a la mayor brevedad posible». Será a partir del próximo lunes.

La diputada regional del PSOE Teresa Rosique reclamó ayer el cese de la directora general de Transportes, Carmen Sandoval, «al haber ocultado datos sobre la supresión de dos trenes de la línea Murcia- Cartagena», y exige que el consejero de Obras Públicas, José Ballesta, comparezca en la Asamblea Regional para dar explicaciones. Y el delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, calificó de «sorprendente y difícilmente entendible» el comportamiento del Gobierno regional.

Desde luego, el comportamiento de Sandoval no lo entiende nadie.