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Martínez Andreo. / M. BUESO
R. F. MURCIA Andreo: «Me dijo que no se lo dijera a nadie, pero no era por ningún motivo»
REGIÓN MURCIA

R. F. MURCIA Andreo: «Me dijo que no se lo dijera a nadie, pero no era por ningún motivo»

La juez considera contradictoria la forma en que el alcalde de Totana y su supuesto intermediario explicaron una comprometida conversación

PPLL

Sábado, 21 de junio 2008, 03:11

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La conversación entre el alcalde de Totana, José Martínez Andreo, y el ex concejal Juan Francisco Casanova, decía así:

-Casanova: He llamado al gallego y he quedao con él pa la semana que viene, pa comer con él.

-Andreo: Vale.

-Casanova: ¿Entiendes o no?

-Andreo: Mmm.

-Casanova: Vamos a hacer una cosa bien hecha.

-Andreo: Ah, tú... ¿pero tú, no?

-Casanova: ¿Eh?

-Andreo: Que tú, tú, tú...

-Casanova: Sí, sí, sí.. Tú tranquilo, tú no. Aquí soy yo, yo sólo, tú nada, ¿me entiendes o no?

-Andreo: Mmm.

-Casanova: Yo luego, a ver si tú me entiendes, yo, como si fuéramos los dos, pero soy yo.

-Andreo: Lo que tú mires, hables y ya está. ¿Mmm? (...)

-Casanova: Pero eso sí, a nadie, Pepe, hostia.

-Andreo: No, no, pero si lo tengo claro, si lo tengo claro.

-Casanova: ¿Eh? Esto tú, yo, tú y yo, y punto.

-Andreo: Ya.

-Casanova: Ni a tu mujer, ni yo a la mía.

-Andreo: No te preocupes, no te preocupes.

-Casanova: ¿Me entiendes o no?

-Andreo: Sí, lo tengo claro, si eso lo tengo yo claro.

-Casanova: Exactamente, ahí eso, pa ti y pa mí, y punto.

La juez María Ascensión Navarro, que instruye las diligencias por la trama de corrupción en Totana, considera que lo que de esa conversación se desprende es el intento de Andreo y Casanova de quedarse con una comisión de 3,6 millones de euros, que el anterior alcalde, juan Morales, había pactado con un grupo promotor gallego por la recalificación de unos terrenos de 2,2 millones de metros. Y señala que las explicaciones que tanto Andreo como Casanova dieron en el juzgado al respecto de esas frases eran contradictorias y poco coherentes, por lo que mantiene sus imputaciones.

Las actas de declaración de Andreo y de Casanova, que están en poder de este periódico, contribuyen a engrosar el embrollo. El alcalde sostiene que de lo que estaban hablando era del intento de venta de una finca de Casanova, que éste quería que Andreo les acompañase en una comida y que la insistencia en que nadie se enterase del negocio -«ni tú a tu mujer, ni yo a la mía»- no tenía razón alguna. «Me pidió que no se lo dijera a nadie y yo asentí, pero sin que hubiese un motivo en particular», afirmó en el juzgado.

Por su lado, Casanova también insiste en que eso era simplemente «una manera de hablar, palabras sin un objetivo concreto».

Curiosamente, mientras Andreo señala que mantiene «una sólida amistad» con Casanova, éste califica la relación como «conocidos, aunque no tienen un trato continuo y no se hacen favores mutuos».

Además, en su primera declaración, prestada ante la Guardia Civil, el alcalde dijo no recordar que hubiese dicho que «hay que dejarles claro que Morales no está en este barco», pero luego, en el juzgado, manifestó que «creía recordar que le había dicho a Casanova que él no era Juan Morales y que no quería saber nada de los compromisos asumidos por éste».

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