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EN SU TEMPLO. La Virgen de la Soledad, ya en la parroquia, sobre su trono. / JUAN LEAL
Devoción de un barrio por La Soledad
EN EL PÓRTICO DE LA SEMANA SANTA LOS PREPARATIVOS

Devoción de un barrio por La Soledad

La familia Albacete López-Mesas ha cedido su imagen a San Antolín

M. DE LA VIEJA

Martes, 11 de marzo 2008, 01:45

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El pasado miércoles ante notario, los hermanos Manuel, Ginés y María Eugenia Albacete López Mesas, cedían a la parroquia de San Antolín la imagen de la Virgen de la Soledad, obra del escultor murciano Sánchez Lozano, para que reciba culto en la iglesia y sea procesionada, como hasta ahora, con la cofradía del Santísimo Cristo del Perdón.

Dicho acto jurídico era mucho más que un «comodato» o préstamo gratuito a la parroquia. Era abrir la posibilidad a todo un barrio, que tiene auténtica devoción por la citada imagen de la Soledad, de darle culto a lo largo del año. Hasta ahora la imagen una vez que era procesionada, se retornaba a sus propietarios.

El pueblo del San Antolín, entusiasta de su cortejo procesional, de antiguo abolengo, fundado por el antiguo gremio de los Tejedores y Torcedores de la Seda, y que desde 1896 fecha de su refundación ha desfilado con el Santísimo Cristo del Perdón como titular, siente especial devoción por la imagen de la Soledad, que desde el año 1943 desfila como broche a la procesión de Lunes Santo.

Fue la abuela de los actuales propietarios, los hermanos Albacete López-Mesas, la que encargó y abonó a Sánchez Lozano la imagen de la Soledad, con destino a una pequeña capilla u oratorio que tenía en su vivienda.

Como la iglesia de San Antolín fue una de las más afectadas por los incendios de la guerra civil, y la que más imágenes perdió, a la hora de reorganizarse la procesión tras la contienda, se encontraba falta de tallas para reponer las que se habían quemado.

La devota murciana, antecesora de los Albacete López Mesas, cedía todos los años su Virgen para que fuese procesionada, retornándola después a su oratorio. Con el tiempo, sus herederos mantuvieron la costumbre de recuperar la imagen tras la procesión, aunque ya no la tenían en un oratorio, sino guardada y sin culto. La Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón siempre ha sentido emocionalmente a la Virgen de la Soledad como cotitular, aunque sin que se haya recogido en sus constituciones, debido a que la tenían en precario. Este año a expensas de la cofradía, se ha construido una peana de mármol para mantener expuesta la Virgen y que reciba culto en la Capilla de la Comunión de la parroquia.

La Hermandad de penitentes y regidores de la Soledad está formada por mujeres, visten túnica negra con vivos magenta. Sólo son hombres los que portan el trono.

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