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FIESTA. Numerosos lorquinos acudieron a la carpa instalada en la Plaza de España para celebrar el nuevo año. / PACO ALONSO / AGM
Campanadas con voz humana
LORCA

Campanadas con voz humana

El responsable de la fiesta de Nochevieja suplió con un micrófono la falta de sonido del reloj de la colegiata

A. S.

Miércoles, 2 de enero 2008, 08:52

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La fiesta de Nochevieja que el Ayuntamiento había preparado en la plaza de España, bajo una gran carpa en la que no faltó un sistema de calefacción para amortiguar los posibles rigores nocturnos contó con la actuación de la orquesta Coyote que empezó a animar desde media hora antes de las doce de la noche.

Con lo que no contaban los organizadores era con la trastada que el reloj de la colegiata de San Patricio gastó a los que, con las uvas en la mano, esperaban ansiosos el sonido de las campanas para comerlas e iniciar así el nuevo año.

El caso es que, en vista de que pasaban los minutos y el reloj parecía enmudecido, el responsable del festejo, Jesús Jódar, cogió un micrófono, salió al exterior, e improvisó con su voz las doce campanadas para que todos los que estaban preparados se pudieran comer las uvas.

Después, siguió el baile hasta bien entrada la madrugada, con un cierto trasiego del personal procedente de los bares cercanos. Por lo demás, y según fuentes de la Policía Local, fue una noche bastante tranquila en cuanto a incidentes reseñables.

Al parecer sólo se registró un robo en un bar de la calle Juan Antonio Dimas, en la zona de San Diego, en el que los ladrones se centraron en las máquinas tragaperras.

Los lorquinos, en buena parte, celebraron el cambio de año con fiestas a nivel familiar y en establecimientos de hostelería que habían preparado planes especiales para esa noche. Tal vez por ello hubo menos movimiento de tráfico hasta bien entrada la madrugada en que regresaron a sus domicilios los que habían elegido desplazarse en coche.

Ese tranquilo cambio de año también se reflejó en el departamento de maternidad del hospital Rafael Méndez, donde no se produjo ningún nacimiento durante la noche, con lo que volvió a repetirse la situación de la Nochebuena en que tampoco se incrementó el censo local hasta la mañana del día siguiente.

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