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Renault Clio R.S.16, pasión por la competición

Renault Clio R.S.16, pasión por la competición

La división deportiva de la marca desvela un prototipo con ocasión del Gran Premio de Mónaco

Redacción

Viernes, 27 de mayo 2016, 19:41

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Para celebrar 40 años de historia en el mundo de las carreras, Renault Sport acaba de dar a conocer en el Gran Premio de Mónaco el Clio R.S.16, un concept car. Kevin Magnussen, piloto del equipo Renault de Fórmula 1, ha sido quien rodó las primeras vueltas con esta nueva propuesta de futuro coche de competición por las calles de Montecarlo. Una particular forma de celebrar la vuelta de la marca del rombo a la categoría reina de la competición.

El pequeño Clio, que hereda la denominación del monoplaza, se ha desarrollado en menos de cinco meses. Monta como «corazón» principal el motor 2.0 turbo de 275 CV y 360 Nm de par procedente del Megane R.S. 275 Trophy-R. Los ingenieros de Renault Sport han trabajado principalmente en la forma de pasar al suelo toda esa potencia. Para ello cuenta con unos trenes rodantes que recurren a soluciones desarrolladas para la competición, con ruedas de 19 pulgadas y una carrocería 60 mm más ancha.

En base a la experiencia adquirida en carreras con el Clio de ligera menor potencia, que es toda una referencia en base a la opinión de los diferentes pilotos, era motivo suficiente para que el chasis del R.S.16 pudiera con una mecánica de 300 caballos de potencia.

Después de posicionar correctamente el motor, la caja de velocidades y el sistema de refrigeración, los ingenieros trabajaron a fondo para acoplar del mejor modo las suspensiones. Y llama la atención que el Clio R.S.16 combina y adapta piezas del Mégane, Kangoo y Espace de serie.

Aunque lo cierto es que se han utilizado muchos materiales del Megane R.S. 275 Trophy-R, como la amortiguación de cartucho deslizante de muelle y amortiguador o el sistema de frenado, compuesto por enormes discos de acero de 350 mm. También adopta la batería de ion litio, que permite ahorrar unos 15 kilos de peso y ganar espacio en el compartimento del motor.

El diseño del tren trasero resulta mucho más sencillo porque es similar al del Clio R3T, la versión de rally, si bien se aumenta la rigidez del balanceo un 50 %. Al acoplar ruedas más grandes de 19 pulgadas, se han recortado ligeramente las aletas para después incorporar los ensanchadores de material compuesto. Estas extensiones se prolongan en los largueros laterales, cerca del umbral de las puertas para destacar una imagen más deportiva.

La parte trasera apenas cambia. El difusor, que contribuye a la eficacia aerodinámica de la carrocería, se completa con un alerón utilizado en la Clio Cup. Las pruebas en el túnel de viento y gracias al estudio de la dinámica de fluidos reflejan que el alerón permite generar 40 kilos de apoyo adicional a una velocidad de 200 km/h.

En la parte delantera destaca por las pequeñas modificaciones en el parachoques para acoplar el intercambiador aire-aire, heredado del Megane R.S. 275, un cambio ingenioso que apenas varía la estética del frontal. El diseño del paragolpes se completa con un convergente específico, una pieza que conserva la textura del kevlar y proporciona un aspecto «racing».

Un coche de carreras

El interior es el de un coche de competición. Con asientos «baquet» y arneses de seguridad de seis puntos, en la parte trasera se quita la banqueta y tampoco lleva climatización, lo que contribuye a una reducción del peso. El color elegido para el Clio R.S.16. es el denominado amarillo Sirius, el emblemático de Renault Sport también utilizado para los monoplazas de Fórmula 1 de este año. La calandra va pintada en negro, como el rombo, el techo y el lado exterior del alerón.

Por fuera, el aspecto del Clio R.S.16 es espectacular con otros detalles habituales en competición, como las llantas Speedline Turini en negro que permiten ver las pinzas de freno Brembo en rojo. En el techo lleva un marcado Renault Sport, con un «stripping» de rombos pixelados en la parte trasera del coche. En cuanto al escape, es más permeable con una acústica favorecedora pero tampoco exagerada por el empleo de un silencioso de doble salida del especialista Akrapovi.

Como símbolo de una nueva forma de trabajo entre los equipos Renault Sport Cars, dedicados a la serie, y los de Renault Sport Racing, dedicados a la competición, el diseño de Clio R.S.16 representa el estilo de cómo van a ser los futuros coches de competición de la marca, aunque a la vista de las primeras imágenes no parece nada lejano.

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