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Vista de la estación de Montparnasse en París
Los sindicatos relajan el paro de los trenes en Francia

Los sindicatos relajan el paro de los trenes en Francia

El país afronta su undécimo día consecutivo de huelga ferroviaria después de que este sábado el apoyo a las movilizaciones cayese hasta el 6,85%

AGENCIAS

Domingo, 22 de junio 2014, 00:49

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El paro de los trenes en Francia, que ayer cumplía su décimo día consecutivo, fue prolongado para hoy por decisión de unas pocas asambleas de trabajadores, cada vez menos numerosas, mientras la tasa de huelguistas se quedó en una cifra marginal del 6,85 %.

La mayor parte de las asambleas de los empleados de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) que se celebraron durante la mañana se decantaron por la vuelta al trabajo, siguiendo una corriente que había empezado a tomar fuerza ayer, después de la adopción en la Asamblea Nacional de una enmienda a la ley de reforma ferroviaria que desencadenó la protesta.

No obstante, en importantes centros de trabajo, como la estación de Montparnasse de París o Saint Pierre de Corps, cerca de Poitiers, los huelguistas votaron por continuar mañana con el movimiento, que desde el principio se ha enfrentado a una oposición muy mayoritaria de la población francesa , según las encuestas realizadas.

El porcentaje de huelguistas se ha ido reduciendo más y más con el paso de los días, y así el 6,85 % comunicado por la dirección de la SNCF era significativamente inferior al 10,48 % de ayer y sobre todo al 27 % de la primera jornada.

Respuesta de Valls

El primer ministro, Manuel Valls, siguiendo la línea que ha mantenido su Gobierno en los últimos días, reclamó el fin del paro: "Una vez más, es hora de que esta huelga acabe". "Estos días de huelga han perjudicado a las finanzas de la SNCF, a la economía de nuestro país, han perturbado la vida de los usuarios, de los estudiantes", subrayó Valls en una entrevista radio-televisada por 'RMC' y 'BFM TV'.

El jefe del Ejecutivo aseguró que desde el inicio ni él ni los ciudadanos han entendido "el sentido" de esta protesta, cuando el proyecto de ley de reforma ferroviaria garantiza "las grandes misiones de servicio público" y "el estatuto" de los trabajadores del sector.

El presidente de la compañía ferroviaria estatal, Guillaume Pépy, cuantificó el costo del paro para la SNCF en "más de 160 millones de euros", una cantidad que comparó con el valor de "15 trenes nuevos que no podremos tener". Pépy anunció que, para compensar por los perjuicios causados a los viajeros titulares de abonos de tren, los diez días de huelga darán lugar a "diez días de trenes gratuitos" para ellos en julio.

El proyecto de ley, que será objeto de un voto de los diputados el próximo martes antes de que su tramitación prosiga en el Senado en julio, contempla la fusión de la SNCF con el gestor de infraestructuras RFF en tres entidades, que asumirán la deuda conjunta de 44.000 millones de euros con el objetivo de estabilizarla.

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