Borrar
Dos personas caminan bajo el temporal. Reuters
'Irma' se debilita en el sureste de EE UU tras arrasar los Cayos de Florida

'Irma' se debilita en el sureste de EE UU tras arrasar los Cayos de Florida

En Estados Unidos ha dejado fuertes inundaciones, una decena de muertos y unos 6,5 millones de abonados sin luz

COLPISA / AFP

Washington

Martes, 12 de septiembre 2017, 07:50

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

'Irma', el que fuera el huracán más poderoso registrado nunca en el Atlántico, se ha degradado a depresión tropical en su avance por el sureste de Estados Unidos, según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de ese país.

A las 23:00 hora local (3:00 GMT del martes), Irma registraba vientos de hasta 55 kilómetros por hora y se ubicaba 10 kilómetros al sur de Columbus (Georgia) y 150 al sur-suroeste de Atlanta (Georgia). El ciclón avanzaba a 24 kilómetros por hora en dirección noroeste, por lo que se le espera pronto en Alabama y Tennessee.

Irma, que en su paso por el Caribe dejó una treintena de muertos y llegó a registrar vientos de hasta 295 kilómetros por hora que lo convirtieron en un poderoso huracán de categoría 5, ya se había degradado esta mañana a tormenta tropical.

En Estados Unidos, donde tocó tierra este domingo, ha dejado fuertes inundaciones, una decena de muertos y unos 6,5 millones de abonados sin luz.

Vuelta a la normalidad

En el Caribe, los habitantes tratan de retornar a la normalidad pese a los enormes daños en las infraestructuras, mientras Estados Unidos, Francia, Holanda y Reino Unido buscan la manera de ayudar a sus territorios de ultramar, gravemente afectados.

Los habitantes de Florida comenzaron el lunes a evaluar los daños materiales, que parecían inicialmente menores a lo esperado. El panorama es espectacular, aunque no catastrófico, según ha afirmado a la agencia Afp Roberto Cuneo, un residente en Miami Beach de 41 años que decidió no irse de su casa y dio cuenta de calles inundadas con hasta 30 cm de agua y palmeras tumbadas por el viento.

En el extremo sur de Florida el panorama era muy distinto. El acceso a los Cayos estaba cerrado. Tras sobrevolar el área, el gobernador Rick Scott declaró que la zona había quedado "devastada" y los parques de casas rodantes destruidos.

Unos 6,3 millones de personas en el sureste de Estados Unidos fueron evacuados por este huracán, que ha provocado uno de los mayores éxodos de la historia del país. Como estaba pronosticado, Irma impactó el domingo por la mañana como huracán categoría 4, en una escala de 5, en los Cayos al sur de la península, y por la tarde volvió a tocar tierra en Marco Island (oeste), pero con categoría 2.

Miami, la mayor ciudad estadounidense en la trayectoria de Irma, amaneció el lunes con ramas, escombros y letreros de sus calles, especialmente en el centro y en el distrito financiero de Brickell, cuyo paseo costero fue tragado por las aguas."Estamos ahora en una fase de recuperación", dijo el alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez. "Pero nos salvamos de la peor parte de la tormenta", agregó. Mientras los residentes empezaban a revisar sus casas, las autoridades advirtieron sobre líneas eléctricas derribadas, aguas negras sin procesar y fauna desplazada, como serpientes y caimanes.

En Bonita Springs, en la costa suroeste de Florida duramente impactada por Irma, grandes áreas estaban inundadas y la ciudad seguía sin electricidad. Algunos trataban de llegar a sus hogares caminando con el agua por la cintura, mientras que otros remaban en canoas.

El presidente Donald Trump, que prometió viajar a Florida "muy pronto", aprobó la declaración de catástrofe natural que permite desbloquear fondos federales de ayuda a los damnificados.

Sin embargo, el coste estimado de los daños fue revisado a la baja el lunes, de unos 100.000 millones de dólares a entre 20.000 y 40.000 millones, luego de que el huracán cambiara de trayectoria sin impactar directamente en la rica costa este de Florida. "Nuestro escenario catastrófico no se materializó", reconoció el experto en la industria de seguros Shahid Hamid.

Cuantificar daños

Cuba, fuertemente azotada durante 72 horas por el viento, las lluvias y penetraciones marinas de Irma, el huracán más mortífero desde Dennis en 2005, ha comenzado el arduo trabajo de cuantificar daños y rehabilitar su dañada infraestructura de servicios.

El impacto en el turismo aún no ha sido evaluado, pero la destrucción que dejó a su paso podría debilitar gravemente a una economía que depende en gran medida de los casi 3.000 millones de dólares anuales que aporta este sector.

Panamá comenzó este lunes la distribución de al menos 90 toneladas de ayuda humanitaria a San Martín -que quedó arrasada por el huracán- y Cuba, mientras que Venezuela -de por sí inmersa en una crisis económica- envió 30 toneladas de alimentos, agua potable y enseres a Cuba y otras islas del Caribe golpeadas por la tempestad. Por su parte, Unicef señaló que evalúa los daños en Cuba para enviar ayuda lo más pronto posible.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios