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C. García
Viernes, 21 de abril 2017, 12:44
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En la ciudad de Chongyiang, en el centro de China, una madre se relajaba en el porche de su casa mientras su hija jugaba en la calle. La madre se relajó tanto que, según informan medio locales, se habría quedado durmiendo. Cuando un amigo de la familia llegó a la casa, no se dio cuenta de que la pequeña, de poco más de un año, jugaba en la calle. Al hacer marcha atrás, pasó por encima de ella, como si de una piedra en el camino se tratara.
No es hasta después del impactante atropello que la madre reacciona al llanto de su hija, que está tendida en el suelo, milagrosamente aún con vida. Rápidamente, la madre y el amigo conductor llevaron a la niña a un hospital para que supervisaran su estado. Solo tenía unos arañazos en la cara y algunas contusiones por el cuerpo, pero nada grave.
No se sabe si fue por aquello de que los niños son de goma, pero el cuerpo de la pequeña consiguió soportar el peso del coche sobre ella. Las imágenes son realmente perturbadoras, no las vean si son sensibles.
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