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f. olmos
Jueves, 30 de marzo 2017, 13:05
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El imposible modelo de belleza femenino que pretende imponer la publicidad y el mundo de la imagen, la pasajera moda de los culos grandes, la desesperación por gustar a los demás para así gustarse a una misma, la crisis económica, la poca cultura que pueden llegar a tener algunas personas en el país más influyente del mundo o la gran 'cara dura' que pueden llegar a tener otras. Todas estas lecciones se pueden extraer de esta misma noticia, que cada cual escoja la óptica que prefiera.
En Florida ha sido condenada a prisión por homicidio involuntario Oneal Ron Morris, conocida en su barrio como 'La duquesa', tras fingir ser una cirujana estética e inyectar en una de sus pacientes (o víctimas) cemento y aceite para darle volumen a sus glúteos. La condenada ya se encontraba en prisión tras su detención en 2011 cuando, tras varias denuncias, la policía descubrió que usaba cola de contacto para sellar las heridas de sus 'operaciones'.
Sin embargo en 2012, estando la condenada ya presa, una de sus víctimas murió a causa de las inyecciones por lo que ahora también ha sido condenada por homicidio. Según se probó durante el juicio, Ron Morris primero probó en sí misma esta práctica y, contenta con los resultados, comenzó a ejercer sin ningún tipo de licencia ni estudios.
La Policía de Miami Gardens, donde se produjo la detención, asegura haber recibido cientos de llamadas de víctimas de esta falsa "cirujana", así como de otros supuestos doctores que practican este tipo de operaciones en domicilios particulares y hasta en habitaciones de hotel de Florida.
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