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f. olmos
Jueves, 9 de marzo 2017, 12:19
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Durante un concierto el 7 de Marzo en Copenhague, Dinamarca, a Drake le lanzaron desde el público una máscara de Kanye West. En lugar de ignorarla y proseguir con el show, el rapero canadiense decidió disfrutar de las risas del público a costa del marido de Kim Kardashian al ponérsela y gritar: «¡Ahora llevo la máscara de Yeezy! ¡Ahora sí que no me vais a joder esta noche!», una clara referencia al miedo que impera en el gremio a meterse con West.
Los dos raperos han tenido sus más y sus menos, aunque en realidad no han pasado de alguna declaración sobre el otro. Drake se burló de Kanye cuando canceló la gira del pasado 2016 en sus redes sociales diciendo que «alguien necesita hacer un 'hit' y dejar de llorar», pero le pidió perdón públicamente cuando Yeezy acabó colapsando y fue llevado a un hospital psiquiátrico para tratarse por paranoia.
La de la máscara parece una broma sin la mayor importancia, pero West es bastante orgulloso, así que ahora todo depende de cómo decida tomárselo. La pelota está en su tejado. Tal y como apuntan algunas voces de la prensa especializada, es muy posible que el canadiense haya esperado un tiempo prudencial tras la recuperación de Kanye para volver a pincharle, en busca de un conflicto abierto. O quizás no era más que una broma. Aunque, cabe reiterar, todo depende de cómo se lo tome West.
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